Madrileños y gallegos, primeros y últimos en examinarse de Selectividad

Los estudiantes madrileños serán los primeros en realizar las Pruebas de Acceso a la Universidad (PAU), conocidas como Selectividad, durante los días 8, 9 y 10 de junio. Los gallegos serán los que más tarde se enfrentan al examen, los días 17,18 y 19 de junio. A partir de 2010 estas pruebas cambian, permitiendo a los estudiantes subir nota haciendo un test sobre las materias relacionadas con la carrera deseada, entre las principales novedades.

Los que pasen estos exámenes tendrán la posibilidad de optar por cualquiera de los 1.000 títulos de grado adaptados al Espacio Europeo de Educación Superior (EEES), conocido como Proceso de Bolonia, que el Gobierno prevé verificar, junto a las comunidades autónomas para el próximo curso 2009-2010.

En el año 2008, un total de 218.150 estudiantes de segundo curso de Bachillerato se matricularon para presentarse a Selectividad, de los que el 82,4% aprobaron, lo que supuso 1,8 puntos más que el año pasado, según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).

Concretamente, en la convocatoria de junio se matricularon 154.952 alumnos y superaron los exámenes el 89,5% , mientras que en la de septiembre se matricularon 42.804 estudiantes y superaron los exámenes el 68,6%. De todos ellos, las mujeres, que representaron el 56,9% de los aspirantes a ingresar en la universidad, aprobaron el 83,4% de las que se presentaron. En el caso de los hombres, el porcentaje de aprobados fue del 81%.

La nueva selectividad

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Tal y como aprobó el pasado mes de noviembre el Consejo de ministros, la nueva selectividad se dividirá en dos fases. En la primera, igual a la actual, se realizará un examen de asignaturas comunes (Lengua y Literatura, Lengua extranjera, Historia o Filosofía, y en su caso, Lengua Oficial). Como novedad, a esta misma fase se le añade un examen adicional de una asignatura de la modalidad de Bachillerato elegida (Arte, Ciencias y Tecnología o Humanidades y Ciencias Sociales). Cada examen se puntúa de 0 a 10, y para poder acceder a la universidad hay que sacar por lo menos un 5 de media.

La segunda parte de la prueba está enfocada a aquellos alumnos que quieran competir por una plaza en una titulación con gran demanda. Por ello, podrán realizar un examen tipo test para subir nota, sobre otras materias de modalidades diferentes a las ya examinadas en la primera fase, y que deben estar relacionadas con la carrera a la que se aspira, aunque no tiene por qué haberse cursado ese Bachillerato, siendo determinadas por cada universidad a principio de curso.