Un buque cisterna evita un asalto pirata con mangueras antiincendios
La tripulación rusa, que navegaba de China a Europa a través del golfo de Adén, actuó con rapidez para evitar el ataque de los bucaneros somalíes
La tripulación rusa de un buque cisterna evitó el pasado domingo que un grupo de piratas somalíes abordara la embarcación utilizando mangueras antiincendios.
La tripulación rusa estaba trasladando desde China hasta Europa, a través del golfo de Adén, un nuevo buque cisterna, el Handytankers Magic, cuando, según dijo una asociación de marineros a la agencia rusa de información RIA Novosti, un grupo de piratas somalíes se acercó a éste.
Los bucaneros lanzaron una granada propulsada por un cohete que cayó en la cubierta y que no llegó a detonar. Los marineros rusos reaccionaron con rapidez, utilizando mangueras antiincendios para disuadir a los piratas.
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"La tripulación del buque cisterna observó en el golfo de Adén un barco con velas negras, desde el cual había partido una lancha que se dirigía directamente hacia el buque", relató el portavoz de los marineros. "Los cuatro piratas que iban en la lancha estaban preparando una escalera de aluminio para subir a bordo del buque, cuando el capitán, Yuri Suponin, ordenó a la tripulación que atacara a los piratas con las mangueras antiincendios de alta presión".
Ataque con lanzagranadas frustrado
Los piratas consiguieron disparar un lanzagranadas desde su lancha contra la cubierta del Handytankers Magic, pero el ataque no tuvo éxito y el proyectil quedó hecho pedazos.
El capitán se comunicó con el puerto de Nakhodka, en el lejano oriente ruso, para informar a las autoridades de que ninguno de los tripulantes rusos resultó herido durante el ataque pirata.
El Handytankers Magic fue construido en China para la empresa griega Roxana Shipping y navega con una bandera de las Islas Marshall. El barco está pasando ya por el canal de Suez, con rumbo a Europa, después de abandonar las aguas plagadas de piratas del golfo de Adén, donde unos 20 buques de guerra de, al menos una decena de países, participan en operaciones contra la piratería.
Los piratas somalíes perpetraron en 2008, según Naciones Unidas, 120 ataques contra embarcaciones, que acabaron con un total de 150 millones de dólares en rescates.
