Israel afirma que ampliará e intensificará la ofensiva en Gaza si es necesario

Israel mantiene su amenaza de ampliar la ofensiva con la entrada por tierra de sus tanques si Palestina no frena el lanzamiento de cohetes artesanales sobre los asentamientos judíos. Fuentes palestinas dan cuenta de 345 muertos y unos 1.600 en estos tres días de bombardeos, mientras que la ONU puntualiza que 51 de ellos son civiles.

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El ministro de Defensa de Israel, Ehud Barak, ha afirmado ante la Knesset, el Parlamento israelí, que la ofensiva militar contra la Franja de Gaza será "tan amplia e intensa como sea necesario", tras tres días de ataques.

"Tenemos una guerra total contra Hamás y los de su clase", ha declarado el ministro, quien ha aclarado que el objetivo de los bombardeos no es la población civil sino los dirigentes de Hamás. Barak ha explicado que, aunque Israel se retiró de Gaza para dar una oportunidad a la creación de una nueva realidad sobre el terreno, Hamás ha usado el territorio como un paraíso terrorista.

Por ello, subrayó que el Movimiento de Resistencia Islámica es "responsable de todo cuanto suceda en Gaza y de sus consecuencias". El ministro ha asegurado, por otro lado, que Israel preparaba esta operación desde hacía varios meses.

Los palestinos recuerdan la guerra de Líbano de 2006 para puntualizar que no les va a ser tan fácil controlar la franja. Las operaciones sobre la zona dieron un nuevo paso la madrugada de este lunes, cuando el ejército israelí atacó símbolos de Hamás en Gaza como la Universidad Islámica o la sede el ministerio de Interior.

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Las milicias palestinas, por su parte, han seguido lanzando cohetes contra el sur de Israel, uno de los cuales ha matado a un israelí y herido a otros siete en la ciudad de Ashkelón, según la radio pública del país. Según datos del Ejército israelí, más de 150 proyectiles han sido disparados contra las localidades cercanas a la franja. Dos israelíes han muerto hasta el momento desde el comienzo de la ofensiva.

La ONU lo considera "inaceptable"

El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, ha indicado que es "inaceptable" la escalada de la violencia en la Franja de Gaza y ha afirmado que la comunidad internacional "no hace lo suficiente" para lograr un cese de las hostilidades.

"Estoy profundamente alarmado por la actual escalada de la violencia en y alrededor de Gaza. Es inaceptable", ha dicho el máximo responsable de las Naciones Unidas en una comparecencia ante la prensa.

Ban ha reiterado su llamamiento al cese de inmediato de todo acto de violencia y actividades militares en la Franja, y pidió a Israel que permita que la ayuda humanitaria llegue a la población civil.

Ha asegurado que los líderes israelíes con los que ha hablado le han garantizado que se permitirá el paso de cargamentos y personal humanitario al territorio palestino.

La SER ha hablado con un representante político de la organización en Cisjordania, que ha admitido que aunque no posean armamento suficiente para enfrentar a Israel, ellos cuentan con "personas dispuestas a dar la vida" por su causa.

La Casa Blanca emplaza a detener los cohetes

Un portavoz de la Casa Blanca, Gordon Johndroe, ha emplazado de nuevo al Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) a detener el lanzamiento de cohetes hacia Israel y a acceder a un alto el fuego duradero.

"Para que acabe la violencia Hamás debe dejar de disparar cohetes hacia Israel y acceder a respetar un alto el fuego sostenible y duradero", afirmó Johndroe.

Washington no ha pedido el fin de los bombardeos israelíes. Además, responsabiliza a Hamás, una organización islamista considerada por Estados Unidos como terrorista, de lo ocurrido en Gaza.

Hizbulá se suma a una nueva intifada

El jefe del grupo chií libanés Hizbulá, Hasan Nasrala, ha hecho este lunes un llamamiento para una nueva intifada contra Israel, no solo en la Franja de Gaza sino también en el mundo árabe, y ha augurado la derrota israelí si lanza una ofensiva terrestre.

"Llamo a una tercera intifada (alzamiento) en Palestina y en todos los Estados árabes, ya que el objetivo (de la agresión israelí) es la resistencia a las aspiraciones palestinas", dijo Nasrala en una grabación difundida a miles de simpatizantes en un estadio de Beirut.

El pasado sábado, el jefe del grupo palestino Hamás, Jaled Meshal, también convocó una tercera intifada contra Israel, en la primera jornada de una serie de bombardeos contra Gaza que han causado más de 300 muertos, según fuentes médicas palestinas.

La primera Intifada se desarrolló en los territorios palestinos ocupados por Israel entre 1987 y 1993 y la segunda fue lanzada en septiembre del 2000 y se extendió hasta febrero del 2005.

Cooperante español: "Se sabía desde el pasado viernes"

Por su parte, Alberto Arce, cooperante español que trabaja para la ONG 'Free Gaza', ha asegurado en la SER que los israelíes pueden entrar en cualquier momento en la franja de Gaza y que se sabía que esto iba a suceder desde el mismo día 19 de diciembre, fecha en la que se rompe la tregua. De hecho, el cooperante español ha señalado que los edificios públicos están vacíos desde la ruptura de la paz el pasado viernes.

Arce ha relatado que ha caído una bomba cerca del taxi en el que viajaba cuando ha hablado para este medio. También ha contado que de seis niñas hermanas, cinco de ellas han sido asesinadas.

Soldados deplazados

El primer ministro israelí, Ehud Olmert, aseguró el domingo que su Gobierno manejará la situación "con sensatez, paciencia y firmeza" hasta "alcanzar los resultados deseados", aunque advirtió de que la ofensiva "puede prolongarse durante mucho tiempo". Por su parte, el ministro de Defensa, Ehud Barak, ha dicho que el Ejército ha desplegado en torno a Gaza a cientos de soldados de infantería y cuerpos acorazados ante una invasión terrestre, pues Israel "profundizará y ampliará su operación lo que sea necesario". Barak ya dijo ayer que la ofensiva "no será fácil y no será breve".

Es por ello, que el consejo de ministros israelí ha aprobado la llamada a filas de unos 6.500 reservistas en preparación a una eventual incursión militar terrestre en la franja de Gaza.

Ataque destructivo

El ataque israelí destruyó el sábado varias sedes policiales y centros de entrenamiento de Hamás, ubicadas en zonas residenciales, así como la estación de televisión del movimiento islamista, que ha continuado sus transmisiones desde un sitio desconocido.

A primeras horas de la noche del sábado al domingo, la aviación militar israelí destruyó la carretera Saladino, y durante la madrugada, los F-16 israelíes bombardearon 23 objetivos, entre ellos edificios donde se reúne el Gobierno de Hamás en consejo de ministros, un almacén en Rafah y lanzaderas de cohetes, según fuentes de la seguridad palestina.

Sin embargo, algunas bombas han caído en viviendas civiles y hospitales de la sobrepoblada y emprobrecida franja, ya agobiada por un bloqueo israelí. Algunos medios occidentales califican el ataque del sábado como el más sangriento ocurrido en un sólo día desde la Guerra de los Seis Días en 1967.

Falta de ayuda humanitaria

El Consejo de Seguridad de la ONU, en una reunión de emergencia, ha pedido emprender las medidas necesarias para permitir la entrada de ayuda humanitaria en Gaza. Israel ha accedido a ello sobre las 16 de la tarde de este lunes.

En una rueda de prensa, Olmert ha asegurado que "la operación en la franja de Gaza está destinada, ante todo, a mejorar la realidad de seguridad para los residentes del sur del país", en referencia a las localidades israelíes blanco de los proyectiles lanados por las milicias palestinas. "Esto llevará tiempo y cada uno de nosotros debe ser paciente de forma que podamos completar la misión", indicó el jefe del Ejecutivo.

Por su parte, el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, ha afirmado este lunes que el responsable de la actual situación que vive Gaza es Hamás, al negarse a prorrogar el alto el fuego pactado con Israel hace seis meses. "Hablamos con ellos y les dijimos: 'por favor, os pedimos que no terminéis la tregua, que siga en vigor y no acabe'. Podríamos haber evitado lo que ha ocurrido", ha dicho Abbas desde El Cairo. Hamás, sin embargo, acusa a Israel de haber violado la tregua después de su finalización oficial el pasado 19 de diciembre.

El embajador de Israel en España ha asegurado que Israel sólo ataca los objetivos de Hamás por lo que hay que lamentar cualquier baja de inocentes. Por su parte, , el viceministro de asuntos exteriores del gobierno palestino ha afirmado que las enormes víctimas civiles constituye un crimen de guerra.