Críticas a la medida del ministro de Trabajo de cerrar las puertas a los inmigrantes

Los sindicatos no comparten los planes del ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, de cerrar el grifo de las contrataciones de inmigrantes en sus países de origen a partir del próximo año. Dirigentes de Comisiones Obreras y UGT consultados por la SER subrayan que Corbacho no planteó la propuesta durante la reunión de la mesa del diálogo social de este miércoles. No obstante, al término de la reunión anunció la propuesta a los periodistas. Desde SOS Racismo se ha tildado la idea de "cortina de humo xenófoba".

SOS Racismo critica a Corbacho por querer culpabilizar a los trabajadores inmigrantes de la crisis económica y el paro. Según esta ONG el ministro de Trabajo e Inmigración divide a los trabajadores en razón de su origen y usa a los extranjeros como excusa y chivo expiatorio de problemas que nada tienen que ver con el fenómeno de la inmigración.

Según el portavoz de esta ONG, Javier Ramírez, dar a entender que la solución para la crisis es acabar con la llegada de trabajadores extranjeros es un mensaje muy grave: "Esta medida es una cortina de humo xenófoba. Son políticas que fomentan las mafias porque las personas recurren a ellas cuando los cauces legales están totalmente cerrados".

Críticas desde los sindicatos

Los sindicatos también han mostrado preocupación porque Corbacho da la sensación de que culpa de la mala situación económica a los trabajadores extranjeros cuando son las primeras víctimas. Dicen que no es nada novedoso porque la contratación en origen siempre está vinculada a la situación de nuestro mercado de trabajo, según fuentes de UGT.

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Desde Comisiones Obreras su secretario confederal de migración Julio Ruiz ha calificado de ocurrencia y pide al ministro que convoque una reunión urgente con patronal y sindicatos para que explique qué quiere hacer con la contratación en origen.

Por su parte, el vicesecretario de Comunicación del Partido Popular, González Pons, ha asegurado en declaraciones a TVE este jueves que "parece una medida en la buena dirección", pero a la vez a reprochado que "llama la atención que se cierre el grifo de la inmigración legal dejando como única puerta para entrar en España la de la inmigración ilegal".

Un trabajo de baja cualificación

La alta tasa de desempleo en nuestro país ha llevado a Trabajo a plantear esta polémica medida. La norma implicaría que los españoles realizaramos trabajos no cualificados que hasta ahora realizaban extranjeros procedentes del tercer mundo.

No obstante, cabe la duda de si los nacionales seremos capaces de dedicarnos a esas tareas. El presidente de Freshuelva considera que muchos nacionales no quieren realizar los trabajos que realizan los inmigrantes en el campo y que estos últimos llevan a cabo la recogida del cultivo de forma muy eficiente y a tiempo.

Por su parte, Raúl Jiménez, portavoz del colectivo de ecuatorianos Rumiñahui pide a Corbacho que rectifique su decisión porque a su entender fomentará la inmigración ilegal, y cuestiona además si los españoles estarán dispuestos a cubrir los puestos de baja cualificación, agricultura u hostelería, que están ocupando ahora los inmigrantes. Desde su colectivo expresan preocupación y sorpresa por las declaraciones del ministro Corbacho y las atribuyen a la presión del momento.

El anuncio de Trabajo

El ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, anunció este miércoles que en 2009 se limitará la contratación de extranjeros en su país de origen a los convenios internacionales firmados por España o a contratos de especialización y apuntó que la cifra de contratos "se aproximará al punto cero".

Según Corbacho "no parece razonable" recurrir a la contratación en origen con una cifra de 2,5 millones de desempleados y aseguró que no llevará al Consejo de Ministros un "catálogo (de ocupaciones de difícil cobertura) tan generoso y tan amplio" como el de este año.