Zapatero será elegido en segunda votación al no conseguir hoy el apoyo suficiente

"Era previsible", ha suspirado el candidato socialista a gobernar la IX Legislatura, José Luis Rodríguez Zapatero. El presidente del Congreso, José Bono, ha confirmado lo que toda la familia política daba por hecho, la necesidad de acudir a una segunda vuelta el viernes en la que votar de nuevo la investidura de Zapatero, que no ha conseguido hoy el apoyo suficiente de la Cámara Baja.

La votación ha comenzado minutos después de que los representantes del Grupo Mixto (Coalición Canaria, UPyD y Nafarroa Bai) cerraran el debate de investidura, un debate marcadamente amable. "Le agradezco su buen tono" ha repetido el presidente en funciones en muchas de sus réplicas. Frase que ha sido correspondida con gesto amable por sus interlocutores, aunque sin dejar a un lado sus quejas.

"La política se hace en Madrid, Victoria y Barcelona", ha espetado la portavoz de Coalición Canaria (CC), Ana Oramas, encargada de abrir la jornada de hoy. Uno de los pilares de su discurso se ha apoyado en el olvido, que según la formación que representa, vive su comunidad autónoma. Oramas ha exigido en esta línea una inversión en infraestructuras similar a la destinada a Cataluña, que ha calificado de millonaria.

Pese a las reivindicaciones trasladadas al candidato a la investidura, Oramas le ha brindado su apoyo en los grandes temas de Estado como la lucha antiterrorista. Sin embargo, la portavoz de CC en el Congreso ha lamentado que durante los debates electorales ninguno de los candidatos de los dos principales partidos políticos se refiriera en sus discursos a Canarias y finalmente ha anunciado que su grupo se abstendrá en la votación de investidura.

La abstención no es una alternativa para UPyD

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La abstención no es una alternativa, para la portavoz de UPyD, Rosa Díez, segunda representante del grupo Mixto en intervenir en la Cámara Baja. La diputada y fundadora del partido ha adelantado que su formación no apoyará la investidura de José Luis Rodríguez Zapatero por entender que la abstención sería "una llamada a la resignación". Díez ha exigido al candidato una reforma de la ley electoral y pactos de Estado sobre terrorismo y educación.

El tono del debate se ha movido en el terreno de la confrontación ideológica. Defensores del pluralismo político, respeto a la defensa de ideas contrarias a las propias, agradecimiento a las formas empleadas en su exposición, han sido algunas de las frases entonadas en las intervenciones. De igual modo ha ocurrido en el discurso de la última representante del grupo Mixto, Uxue Barkos, de Nafarroa Bai.

Paz condicionada

Barkos ha tendido la mano de su formación para la búsqueda de la paz, pero nunca para "subirse al carro de un bipartidismo ineficaz". Barkos no sólo se ha mostrado contraria al bipartidismo, sino también a la ley de partidos. "A determinados partidos se les derrota en las urnas, y si alguien tiene también experiencia en esto es la formación que represento", ha dicho.

El presidente en funciones ha vuelto a tirar de un repertorio de elogios en su turno de réplica en un intento por afianzar la amabilidad del tono en las intervenciones. Zapatero ha aprovechado su respuesta para recordar al recientemente fallecido, Carlos Chivite, ex secretario general del PSN. La invitación al recuerdo ha levantado a sus señorías de los asientos para mantener por unos minutos un sonoro aplauso en la Cámara.