Muere el dirigente del PP gallego Xosé Cuiña
Desempeñó un importante papel político durante los trece primeros años del Gobierno de Manuel Fraga hasta que fue destituido en enero de 2003
El diputado del PP Xosé Cuiña, de 57 años de edad, ha fallecido esta mañana en el Complejo Universitario de Santiago de Compostela (CHUS) a consecuencia de una neumonía que lo mantenía hospitalizado desde hace dos semanas, según confirmaron fuentes de la familia del político.
Xosé Cuiña desempeñó un importante papel político durante los trece primeros años del Gobierno de Manuel Fraga y fue considerado su delfín político hasta que fue destituido en enero de 2003 como conselleiro de Política Territorial tras confirmarse que empresas de su familia vendieron material para limpiar las costas afectadas por la marea negra del ''Prestige''.
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Uno de los máximos exponentes del conocido como sector de la boina del PP gallego, Xosé Cuiña era natural de Lalín, ciudad de la que fue alcalde durante once años, desde 1979. En 1989 fue elegido diputado en el Parlamento gallego y un año después fue nombrado secretario general del PPdeG, cargo que ostentó durante diez años.
El hombre que lo fue casi todo en la política de Galicia
Alcalde, presidente de Diputación, conselleiro, secretario general del PPdeG, diputado y empresario, José Cuiña lo fue casi todo en Galicia hasta enero de 2006, en que definitivamente se frustró su ambición de ser el sucesor de Manuel Fraga.
Cuiña presentó batalla en el proceso de sucesión, e incluso fue protagonista, sin aparecer en pantalla, de un intento de rebelión en el PP de Galicia. Los populares orensanos, poco después de su renuncia, amenazaron con escindirse del partido, encabezados por su presidente, José Luis Baltar, considerado del sector "de la boina", el rural del PP, frente al del "birrete", el urbano y que encarna Mariano Rajoy, según los términos acuñados por el propio titular de la Diputación de Ourense.
Finalmente, y al ver que no recababa los apoyos necesarios, Baltar comunicó a José Cuiña que respaldaría a Alberto Núñez Feijóo, con lo que el que fue casi todo en la política en Galicia se quedó fuera de la sucesión de Fraga.
