40 latigazos por llamar Mahoma a un peluche
Una profesora de Sudán encarcelada por permitir que sus alumnos trivialicen el nombre
La profesora británica Gillian Gibbons, que ejerce en un colegio privado de Jartum, podría ser acusada de afrenta al Islam por el presunto delito de haber permitido que sus alumnos pusieran el nombre de Mahoma a un osito de peluche.
Un funcionario del Ministerio de Justicia sudanés que ha pedido el anonimato, ha afirmado que Gibbons, de 54 años de edad, y que fue detenida el pasado domingo, podría ser acusada también de incitar a la violencia religiosa. Las autoridades judiciales rechazaron poner en libertad bajo fianza a la profesora para que las investigaciones "no se vean obstaculizadas y para proteger su integridad".
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El primer ministro británico, Gordon Brown, dijo hoy que cree que las autoridades sudanesas aún no han presentado cargos contra la profesora. "Nuestra embajada en Jartum le está facilitando toda la ayuda necesaria", ha señalado el jefe del Ejecutivo británico.
Gibbons, que trabajaba en el colegio privado Unity High School de Sudán, fue arrestada después de que las autoridades recibiesen las quejas de los padres de algunos alumnos, al parecer ofendidos porque se había puesto el nombre de Mahoma a un osito de peluche, algo que va contra los preceptos de Islam, que prohíbe trivializar el nombre del Profeta.
Los compañeros de Gibbons afirmaron que la docente cometió un "error inocente" al permitir que sus alumnos, de seis y siete años, pusieran de nombre Mahoma a un peluche, según los medios británicos. De acuerdo con la legislación sudanesa, la pena contra Gibbons puede ser de seis meses de cárcel, cuarenta latigazos o una multa, en caso de que sea encontrada culpable.
