El Valencia cumple y golea al Elfsborg sueco (3-0) y deja casi sentenciada su participación en la Liga de Campeones

El Valencia cumplió con el objetivo marcado y goleó por 3-0 al Elfsborg sueco, un rival de escasa calidad que sólo aportó voluntad y que fue claramente superado por los de Quique, que combinaron momentos de juego excesivamente lento con otros de gran calidad, gracias a las espectaculares acciones de Vicente, Silva y Joaquín.

La alineación de Vicente fue precisamente la gran sorpresa que se guardaba el técnico del Valencia, Quique Sánchez Flores, y el valenciano pronto dejó claro que quiere recuperar el tiempo que le han hecho perder las lesiones en las dos últimas temporadas, ya que a los 6 minutos adelantaba a su equipo al aprovechar un rechace del meta sueco a un disparo de Villa.

El Valencia movía sin demasiada rapidez el balón pero la infinita superioridad técnica sobre su rival le permitía ir coleccionando ocasiones de gol y antes de llegar al primer cuarto de hora Villa y Moretti pudieron ampliar la ventaja.

Se barruntaba una goleada sobre el terreno de juego y los suecos se atrincheraron con dos líneas de cuatro frente a su área ante las acometidas del conjunto español, que cargó en exceso el juego por la banda izquierda donde las diabluras de Vicente ponían en serios apuros a la zaga escandinava.

Los locales fueron superiores

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Los locales se sabían superiores, aunque no terminaron de cristalizar en gol sus acciones ofensivas frente a un rival que apenas inquietó y que sólo en dos saques de esquina inquietó al meta Cañizares.

Con la mínima ventaja concluyó el primer acto en el que el Valencia dispuso de más de un 70 por ciento de la posesión del balón ante un Elfsborg que llegó mejor parado de lo que se esperaba a los vestuarios.

En la reanudación, el Valencia siguió pecando de un juego excesivamente horizontal hasta que apareció la genialidad de Silva.

El menudo futbolista canario en apenas tres minutos echó mano de repertorio, primero para sentar a tres rivales en el área y mandar de rebote un balón al poste, y posteriormente para marcar de cabeza sorprendiendo a los enormes centrales suecos.

Tranquilidad tras los goles

El segundo gol y la salida al campo de Morientes cambiaron la cara al Valencia. Fueron los minutos en los que además Joaquín sacó a relucir toda su calidad para desbordar y asistir, y al igual que hizo en el segundo gol, el gaditano dio una nueva asistencia de lujo, en esta ocasión a Morientes, para anotar el tercero a veinte minutos de final.

Pese a la gran superioridad de los de Mestalla, el marcador ya no sufrió más variaciones y el Valencia dejó la eliminatoria prácticamente encarrilada con vistas al partido de vuelta en Suecia donde debe certificar sin grandes problemas su clasificación para la fase final de la Liga de Campeones.