Sin carné, sin luces, borracho y a 170 km/h
La policía detiene en la localidad pontevedresa de Vilagarcía a un joven que conducía de manera temeraria
La Policía Local de Vilagarcía detuvo la pasada madrugada a un joven de 22 años de edad que protagonizó una persecución policial por distintas calles de la localidad donde circulaba a gran velocidad, sin carné, sin luces y bajo los efectos del alcohol. El detenido, vecino de Vigo, está acusado de los delitos de desobediencia a la autoridad y conducción bajo los efectos del alcohol.
Los hechos se produjeron sobre las 4.00 horas cuando una patrulla de la Policía Local observó a un vehículo haciendo eses, sin luces e invadiendo el sentido contrario, motivo por el que fue interceptado por los agentes.
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Los agentes se pusieron al lado del turismo y pidieron a su conductor, que responde a las iniciales de D.M.P., que se echase a un lado, pero éste se negó y siguió su camino, llegando a superar los 170 kilómetros por hora, según consta en el atestado policial.
La persecución finalizó cuando el joven se estampó contra un muro, que quedó totalmente destrozado. Los agentes calculan que el joven circulaba a unos 100 kilómetros por hora cuando se produjo el accidente.
Presumió de tener jueces en nómina
Debido al impacto sufrido, al joven le saltó el airbag del vehículo, provocándole varias quemaduras de las que fue atendido en el mismo lugar de los hechos. Tras ello, fue conducido por los agentes a dependencias policiales, donde se le practicó la prueba de alcoholemia, que dio resultado positivo, motivo por el que fue detenido.
Según informó la Policía Local, el joven mostró en todo momento un "carácter arrogante" y, de hecho, explicó a los agentes que su padre estuvo en busca y captura internacional, que tenía jueces en nómina y, por ello, no le preocupaba lo que le pudiese pasar. Además, dijo que prefería que lo trasladasen a la Audiencia Provincial, ya que allí tenía más amigos.
