Rajoy tacha de "vergüenza" la muerte de seis soldados en Líbano y Zapatero le llama "demagogo"

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha asegurado en la sesión de control al Congreso que las tropas españolas en el exterior disponen ahora de los "mejores medios de seguridad" que nunca han tenido. Respondía así al presidente del PP, Mariano Rajoy, quien había asegurado antes que es una "vergüenza" que el vehículo en el que murieron los soldados careciera de inhibidores de frecuencia.

Zapatero respondió en el pleno de la Cámara a una pregunta del líder del PP sobre las medidas de seguridad de los militares españoles tras la muerte de seis de ellos en Líbano, en un atentado que calificó de "vergüenza" porque perecieron en un vehículo que carecía de inhibidores de frecuencia. Los inhibidores son mecanismos electrónicos que impiden accionar una bomba por control remoto.

Esta mención del jefe de la oposición provocó un duro enfrentamiento con Rodríguez Zapatero, quien le replicó de forma rotunda: "La vergüenza y la demagogia más burda son sus palabras".

Rajoy hizo notar que el atentado del domingo en el sur de Líbano fue muy similar al que le costó la vida en febrero pasado a la soldado Idoia Rodríguez en Afganistán, quien iba en un vehículo blindado BMR que tampoco tenía inhibidor de frecuencia, e instó al presidente a explicar qué iba a hacer ahora. Zapatero negó que ese caso se pudiera comparar con el de Líbano.

La seguridad, "preocupación" del Gobierno

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El presidente del Gobierno afirmó que la seguridad de los soldados "ha sido una preocupación constante del Gobierno" y reveló que los primeros inhibidores se instalaron en el verano del 2005, con el PSOE en el Ejecutivo, en tanto que en ocho años de Gobierno del PP no se había equipado con ninguno a los vehículos militares fuera de España. Explicó también que en otoño pasado el Estado Mayor de la Defensa decidió implantarlos en todos los vehículos en el exterior pese a que esta medida "no garantiza obviamente" que se evite un ataque terrorista.

La empresa que fabrica estos mecanismos, prosiguió, los está entregando desde el mes de mayo y el proceso de instalación ya ha comenzado, aunque lleva un tiempo porque es muy complejo técnicamente.

A Rajoy no le convencieron estas explicaciones y, tras espetar al presidente que lo ocurrido en Líbano "es una vergüenza", le recordó que cuando el PP apoyó el envío de tropas a este país y a Afganistán le pidió que "dijera la verdad" porque los soldados "se iban a jugar la vida".

Primer asalto

Antes del inicio de la sesión de control en el Congreso, Zapatero había expresado "el reconocimiento y el respaldo a la valiosa y heroica labor" del contingente español en el país árabe, sacudido por una guerra que enfrentó el pasado verano a la milicia de Hezbolá con Israel. "Hemos pagado un precio muy alto, pero no se alterará nuestro compromiso con la paz en Oriente Medio", dijo. En tono solemne, nombró uno a uno a los seis soldados asesinados, de los que dijo "siempre serán nuestros y siempre estarán con nosotros", lo que ha levantado los primeros aplausos en el hemiciclo.

Después de hacer un extenso repaso en clave positiva de los resultados del último Consejo Europeo de Bruselas, Zapatero cedió la palabra a Rajoy, quien lo primero que hizo desde la tribuna de oradores fue reprochar al presidente que haya esperado hasta hoy para pronunciarse sobre el atentado de Líbano. "Me hubiera gustado que se hubiera dirigido al conjunto de la nación y no hubiera esperado hasta hoy", afirmó.