El arzobispado de Granada niega la entrada a dos religiosas por ser extranjeras
Las Madres Dominicas se niegan a incluir a dos indias en aplicación a una normativa adoptada por el actual arzobispo
El Arzobispado de Granada justificó hoy la expulsión de dos postulantes indias del convento de la Piedad, de la orden de las Madres Dominicas, en que ningún extranjero puede ingresar en un convento o monasterio de clausura "sin antes haber pertenecido como profesas a una congregación religiosa en su país".
Según indica la institución eclesiástica en un comunicado, éste fue el caso de las dos jóvenes de la India a las que no considera "ni siquiera postulantes", al contrario que la madre superiora del convento de la Piedad, por la "brevedad" de su vida conventual.
Más información
El Arzobispado explicó que las dos jóvenes llegaron al convento de las dominicas de Huéscar, perteneciente a la Diócesis de Guadix, el 28 de enero, y "a los pocos días mostraron su deseo de no permanecer allí", tras lo cual se marcharon al convento de la Piedad de Granada, donde conocían a una de las monjas, también de nacionalidad india.
Añadió que, dada la "normativa vigente en la Iglesia" católica sobre los extranjeros y ante la "situación anómala" que representaban las dos jóvenes indias, el vicario para la Vida Consagrada de la Archidiócesis de Granada "no les permitió quedarse", por lo que volvieron a su país el 25 de febrero.
El Arzobispado defendió que esta norma se creó "para salvaguardar la autenticidad de la vocación religiosa y de la vida conventual y nunca en función del lugar de origen de las monjas".
Muestra de ello, indica, es que de las casi 300 monjas que hay en los 22 conventos de clausura de la Diócesis de Granada, más de 50 son extranjeras, de las cuales la "gran mayoría" proceden de la India y el resto son de países africanos o iberoamericanos, como el Perú o México.