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Internautas españoles, implicados en la mayor red de pornografía infantil internacional

Se trata de una operación internacional con más de 2.360 sospechosos en 77 países, entre ellos España

La Policía austríaca ha ayudado a desarticular una enorme red internacional de pornografía infantil, con 2.360 sospechosos en 77 países, entre ellos España, según confirmó la propia Policía austriaca. Se trata de la mayor operación en este tipo de delito, según ha anunciado el ministro austriaco del Interior, Günther Platter.

En un servidor de una empresa de internet fueron hallados ocho bancos de datos con vídeos, a los que habían accedido más de 8.000 usuarios en 24 horas, sin que la empresa tuviera conocimiento del contenido, según el ministro.

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Gerald Hesztera, coronel de la Policía Federal austríaca de lo criminal, confirmó que en la lista de países con sospechosos figuran España y catorce países latinoamericanos: Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, República Dominicana, Ecuador, El Salvador, México, Panamá, Perú, Venezuela y Paraguay, además de Puerto Rico.

Operación a nivel internacional

De los más de 2.300 sospechosos sólo 23 son austriacos y catorce de ellos ya han confesado su culpabilidad. 600 personas están siendo seguidas por el FBI en EEUU, mientras que hay 400 sospechosos que han sido interrogados por la policía en Alemania.

El portavoz de la Policía austriaca explicó que se ha coordinado la operación a nivel internacional, con la participación y ayuda de Interpol y Europol, y que el hecho de que la noticia salga de Austria obedece a que se optó por difundirla desde este país alpino.

En las imágenes difundidas por la Red se muestran gravísimos maltratos sexuales a niños. Según ha apuntado el propio ministro austriaco, Günther Platter, el propietario de la empresa de internet que mostraba los contenidos es incocente, ya que desconocía este asunto.

Material confiscado

La Policía Federal austríaca de lo criminal ha confiscado 31 ordenadores personales, siete computadoras portátiles, 23 discos duros externos y otros sistemas de almacenamiento de datos, así como 1.132 DVDs, 1.428 disquetes y 213 videocasetes con un total de 8 terabytes de material pornográfico infantil.

En julio de 2006 llegaron los primeros indicios que condujeron al descubrimiento del caso al denunciar el propietario de un servidor de internet en Austria que habían sido cargados en su sistema ocho vídeos pornográficos por piratas cibernéticos.

El material pornográfico estaba conectado a un vínculo de una página rusa de internet, donde se ofrecía para ser descargado en internet. Platter precisó que esta página de internet fue cerrada inmediatamente y que el ministerio obtuvo la lista de usuarios que habían accedido a ella.

Entre los sospechosos se hallan, entre otros, estudiantes, trabajadores, funcionarios y jubilados, siendo el más joven de 17 años y el más longevo de 69.

 
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