Alegato contra el terrorismo en la primera reunión de la Alianza de Civilizaciones

El Grupo de Alto Nivel encargado de poner en marcha la Alianza de Civilizaciones propugnada por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha inaugurado su primera reunión a las 11 horas en Palma de Mallorca. Tanto el presidente español como el primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, han hecho en sus discursos un alegato contra el terrorismo.

"Ninguna cultura tolera la explotación de los seres humanos, ninguna religión permite la matanza de inocentes, ninguna civilización acepta la violencia o el terror". Con estas palabras el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha inaugurado los trabajos de esta primera reunión del Grupo de Alto Nivel de la ONU para la Alianza de Civilizaciones.

El mandatario español ha repasado en su discurso de apertura los objetivos de la Alianza de Civilizaciones. "Fomentar el conocimiento y respeto del otro, el entendimiento mutuo, la moderación, el aprecio de la diversidad y la conciencia de la creciente e inevitable interdependencia entre todos los pueblos y naciones", ha subrayado.

El otro copatrocinador, el primer ministro turco Recep Tayyip Erdogan, ha subrayado que "el diálogo es la única salida para acabar con el extremismo, la intolerancia y el terrorismo".

Los expertos de la ONU celebrará varias reuniones trimestrales más con el objetivo de presentar en la segunda mitad de 2006 un informe definitivo con un programa de acción que recomiende medidas concretas a los Estados, las organizaciones internacionales y la sociedad civil.

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Se espera que este grupo de expertos propongan proyectos de cooperación e intercambio entre países principalmente en áreas de cultura, educación y medios de comunicación y prensa.

Según fuentes gubernamentales españolas, la propuesta ha atraído ya a unos 30 países e instituciones internacionales considerados 'Amigos de la Alianza'. Entre los países están Estados Unidos, Reino Unido, Rusia, Egipto, Italia, China, Argentina y Mèxico, y entre las instituciones, la Comisión Europea, la Liga Arabe y la Conferencia Iberoamericana. La idea no ha sido bien recibida, en cambio, por el principal partido de la oposición en España, que la califica de "humo".

La iniciativa fue lanzada por Zapatero durante su primera participación en la Asamblea General de la ONU, en septiembre de 2004, y respaldada formalmente por el secretario general de la ONU, Kofi Annan, en julio de 2005.