Maragall cierra la crisis de su Gobierno con la confirmación de todos los consejeros
El presidente de la Generalita organizará su Ejecutivo en cuatro macroáreas
El presidente de la Generalitat de Cataluña, Pascual Maragall, ha dado por cerrada la crisis de su Gobierno con la confirmación de mantener a todos sus consellers en sus cargos de forma "indefinida" y ha confirmado su confianza en todos ellos. La semana pasada Maragall había aplazado sine die la remodelación de su Ejecutivo.
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En un comunicado hecho público por la Oficina de la Presidencia de la Generalitat, el presidente catalán ha anunciado además que agrupará las consejerías en cuatro grandes áreas para "mejorar la coordinación y el control de coherencia de las políticas impulsadas por el Gobierno". Las áreas de gobierno serán la "Social, Económica, Territorial y Política" y sus consejerías respectivas se reunirán quincenalmente y podrán contar con la presencia del propio presidente de la Generalitat o del conseller primer.
Según el comunicado, Maragall ha convocado al conseller primer, Josep Bargalló, al conseller de Relaciones Institucionales, Joan Saura, al conseller Portavoz, Joaquim Nadal, y al secretario del Gobierno, Ernest Maragall, para hacer efectiva su decisión. No obstante, mientras se enviaba este comunicado a los medios de comunicación, en el Parlament, portavoces parlamentarios del tripartito ya apuntaban a esta decisión de agrupar las consellerias en áreas.
Largo pulso
El comunicado de la Generalitat pone fin a un largo pulso de declaraciones y desmentidos que ha enfrentado al presidente y a los partidos que integran su Gobireno tripartito. Ayer mismo los dirigentes de las tres formaciones que componen el Gobierno -ERC, IC-V y PSC- acordaron aplazar cualquier reajuste de carteras al menos hasta principios de diciembre. Sólo unas horas después, en los micrófonos de la cadena SER, Maragall había puesto fecha a la remodelación y la había fijado para el 2 de noviembre.
Horas antes de comunicarse esta decisión, el portavoz parlamentario de CiU, Felipe Puig, había acusado a los socios del tripartito de "humillar" a Maragall, y había pedido que se pusiera fin al "juego de las sillas" entre consellers "interinos". CiU considera que el Gobierno tripartito está en "crisis permanente" y ello repercute en la "parálisis" de Catalunya y en la credibilidad de sus instituciones.
