La UE flexibilizará las cuotas para que entre el textil chino retenido
España pide que se respeten las cuotas pero admite "flexibilidad" con la mercancía retenida
Los Veinticinco han aceptado hoy flexibilizar las restricciones a los textiles procedentes de China para que puedan entrar todas las mercancías que están retenidas en las aduanas de la Unión Europea, y reclamaron a la Comisión que pacte con China una "solución urgente" a la crisis provocada por el desbordamiento de las cuotas. Un equipo de expertos en Comercio del Ejecutivo comunitario viajó esta tarde a Beijing para negociar con las autoridades del país asiático.
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El comité textil de la Unión, donde están representados los Estados miembros y la Comisión, se reunió hoy de forma extraordinaria para intentar desbloquear la situación. Durante el encuentro se registró de nuevo un enfrentamiento entre los países que no tienen industria textil y sí grandes cadenas de distribución -como Suecia, Países Bajos o Dinamarca- que defendieron un aumento de las cuotas, y los países productores -como España, Italia o Francia- que exigieron que se respeten las restricciones pactadas entre Bruselas y Beijing el pasado 10 de junio.
No obstante, incluso España o Italia admitieron la posibilidad de aplicar cierta "flexibilidad" con los artículos que se amontonan en las fronteras de la UE, según han informaron fuentes del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio. Los Veinticinco ya pactaron a principios de agosto flexibilizar la cuota de jerseys chinos, que fue la primera en superarse, pero desde entonces la situación ha empeorado y los problemas afectan también a pantalones, blusas, sujetadores, camisetas e hilo de lino.
El Ejecutivo comunitario puso sobre la mesa tres posibilidades de flexibilización que pretende negociar con los chinos: utilizar parte de la cuota de 2006; transferir a jerseys y pantalones las cuotas de otros productos cuyas importaciones se encuentran muy por debajo de los umbrales pactados, como la ropa de cama o la mantelería; o permitir la entrada de todos los productos encargados antes del 12 de julio, fecha en la que entró en vigor el acuerdo con China, tal y como ha pedido la patronal de los distribuidores, EuroCommerce.
España ha defendido la necesidad de que se respeten las cuotas de importaciones procedentes de China, firmadas en junio, aunque ha admitido la posibilidad de aplicar cierta "flexibilidad" con la mercancía que se encuentra retenida en las fronteras de la UE, según han indicado fuentes del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio.
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