El Congreso boliviano decide en medio del caos si acepta la renuncia de Mesa

El Congreso de Bolivia decidirá en las próximas horas si acepta la renuncia de Mesa. Aún no se ha iniciado la reunión de los diputados en la Casa de la Libertad de Sucre, que debía haber comenzado a las 16.30 (hora española), y que ha sido pospuesta mientras los diputados buscan un consenso previo a la sesión. Entre tanto, el país permanece sumido en el caos y miles de manifestantes se han trasladado a Sucre para pedir elecciones anticipadas y para mostrar su rechazo al presidente del Senado, Hormando Vaca Díez, que es quien deberá asumir la presidencia si el Congreso acepta la renuncia de Mesa.

El presidente del Senado, Hormando Vaca Díez, llegó esta mañana a la ciudad de Sucre, 760 kilómetros al sudeste de La Paz, donde fue recibido en el aeropuerto Juana Azurduy de Padilla en medio de fuertes medidas de seguridad.

Pasajeros que llegaron en el mismo vuelo, procedente de Santa Cruz, informaron de que seis parlamentarios que debían embarcarse en esa ciudad perdieron la combinación, por lo que se da por descontado que en la reunión del Congreso no estarán sus 157 miembros.

Además, se descarta que la reunión empiece a la hora prevista ya que los parlamentarios de Chuquisaca y las autoridades cívicas de este departamento pidieron que los jefes de bancada y presidentes de las brigadas departamentales busquen consensos previos.

Controles y carreteras cortadas

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Vaca Diez y el presidente de la Cámara de Diputados, Mario Cossío, sostendrán esa reunión para llegar a la sesión del Congreso por la tarde, hora local, ya con un acuerdo sobre el nombre del sucesor de Mesa, se da por descontado que será aceptada la renuncia.

La ciudad está, desde esta mañana, bajo un fuerte dispositivo de seguridad formado por la Policía y el Ejército. Hay controles a lo largo de todo el trayecto, desde el aeropuerto hasta el centro, según informa la prensa local.

Observadores y hospitales al límite

Argentina y Brasil han escuchado la petición de Mesa para que envíen observadores ante la gravedad que está alcanzando la crisis. 120 carreteras siguen cortadas y las nueve capitales regionales permanecen aisladas. Los manifestantes han tomado pacíficamente siete campos petrolíferos en Santa Cruz: cuatro pertenecen a Repsol-YPF, y los otros tres a British Petroleum.

Cruz roja ha advertido de que los hospitales de La Paz y el Alto no tienen gas para cocinar y sólo disponen de alimentos y oxígeno para cinco días más. Muchas familias carecen de alimentos, porque sus ingresos son diarios y llevan 22 días con muy poco trabajo.