Cientos de personas en la marcha "por la dignidad" del Severo Ochoa
Entre los asistentes estuvo el doctor Luis Montes
Madrid
Más de 1.500 personas, según los organizadores (300 según la policía), participaron en la marcha convocada este sábado en protesta por la crisis que vive el Hospital Severo Ochoa de Leganés a raíz de la divulgación de unas denuncias anónimas sobre presunta mala praxis en la sedación de enfermos.
La manifestación había partido a las nueve y media de la mañana desde el centro sanitario apoyada por unas 500 personas y finalizó hacia las 13.45 horas en la Puerta del Sol, sede de la Presidencia del Gobierno de la Comunidad de Madrid, tras cubrirse a pie unos 14 kilómetros de recorrido.
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La marcha transcurrió sin incidentes y concluyó con la lectura de un manifiesto, a cargo del secretario general de la Unión de Actores, Jorge Bosso, en el que se exigió la dimisión del consejero de Sanidad y Consumo, Manuel Lamela, por su forma de gestionar la crisis, y se incidió en la necesidad de respetar el principio de presunción de inocencia y de "recuperar la confianza" entre médicos y pacientes.
La presidenta de la Junta de Personal del Severo Ochoa, Isabel Serrano, se mostró "contenta" con el apoyo obtenido a la convocatoria y destacó la dureza del recorrido, que realizaron a pie y bajo un sol de justicia. "El tema está muy enconado y hay que seguir". "No vamos a parar", advirtió Serrano en declaraciones a Europa Press.
Luis Montes acudió
Entre los manifestantes se contaban médicos y demás trabajadores del hospital, facultativos de otras áreas sanitarias y vecinos de Leganés, así como el primer teniente de alcalde de Leganés, Raúl Calle; las diputadas de la oposición Matilde Fernández (PSOE) y Caridad García (IU); y representantes de los sindicatos UGT y CCOO.
El doctor Luis Montes, que fue relevado temporalmente y posteriormente cesado como jefe del Servicio de Urgencias cuando la Consejería de Sanidad comenzó a investigar los hechos, también se sumó a esta acción reivindicativa, cuya lema es "Marcha por la dignidad".
Los participantes iban ataviados con gorras y lazos de color naranja en solidaridad con el Hospital Severo Ochoa y como reclamo para una mejora de los servicios de cuidados paliativos. La convocatoria de esta marcha, aprobada en asamblea de trabajadores del centro hospitalario, estaba respaldada por CCOO. y UGT de Madrid, la Federación Regional de Asociaciones de Vecinos (FRAVM) y la Federación de Asociaciones de Defensa de la Sanidad Pública.
