La policía busca a un psicópata 'cirujano' como autor del crimen de la playa de la Barceloneta
El juez encarga otra autopsia para obtener más detalles
El juez que investiga el caso del cadáver descuartizado hallado el pasado día 5 en la playa de la Barceloneta de Barcelona ha encargado una segunda autopsia para obtener más detalles del espeluznante crimen, que la policía atribuye a un psicópata con buenos conocimientos quirúrgicos.
Fuentes próximas a la investigación han explicado que los agentes encargados del caso están "horrorizados" por el crimen, ya que "nunca, hasta ahora, la policía española se había enfrentado a un caso como éste", dada la crueldad desplegada por él o los asesinos, que, al parecer, se entretuvieron "mucho tiempo" en las tareas de trocear y despellejar a su víctima.
Más información
El cuerpo encontrado dentro de la bolsa de deporte verde abandonada en la playa no sólo estaba descuartizado sino "despellejado minuciosamente y con habilidad", según se desprende de la autopsia, que ha confirmado que alguien con conocimientos médicos y posiblemente con la ayuda de un bisturí "bien afilado" cortó el cuerpo, lo decapitó, hizo incisiones en él y le sacó la piel.
UN PSICÓPATA QUE SABE LO QUE HACE
El juez que investiga el caso, el titular del juzgado de instrucción número 9 de Barcelona, ha encargado a los forenses del Instituto de Medicina Legal que practiquen una segunda autopsia, más detallada, al cadáver, para intentar buscar más indicios sobre la personalidad del descuartizador.
"Al principio pensamos que podría ser un ritual macabro o una broma de muy mal gusto hecha por estudiantes de medicina, pero ahora nos inclinamos más por pensar en algún psicópata que sabía muy bien lo que hacía", ha declarado una fuente próxima a las pesquisas policiales, que tampoco descartan que se trate de una venganza de bandas criminales que han querido "horrorizar" y mostrar el daño que pueden provocar.
SIN PIES NI CABEZA
En principio, los investigadores sólo tienen claro que el cadáver, del que no ha aparecido la cabeza ni los pies, pertenece a una mujer de mediana edad y de raza blanca, y son conscientes de que será muy difícil identificarlo con nombres y apellidos.
Los investigadores del Grupo de Homicidios de la Jefatura Superior de Policía de Barcelona, según las mismas fuentes, están "horrorizados" con este crimen y buscan en sus archivos antecedentes de descuartizamientos, pero no aparece ninguno con el grado de "conocimiento profundo de anatomía y cirugía" que se desprende en este caso.
