Nace en Dublín la Europa de los 25

Los jefes de Estado o de Gobierno de los 25 socios comunitarios posaron hoy en los jardines del Palacio Farmleigh de Dublín, en la primera foto de familia oficial de la nueva Unión Europea ampliada.

Con retraso, debido al la tardanza del primer ministro británico, Tony Blair, los Veinticinco cumplieron así un trámite más de esta jornada festiva, que culminará con la izada de la bandera comunitaria en la residencia de la presidenta de Irlanda, Mary McAleese.

Como manda el protocolo, el centro de la primera fila lo ocupó el el primer ministro irlandès y presidente de turno de la UE, Bertie Ahern, flanqueado por el máximo mandatario chipriota y por el presidente francès, Jacques Chirac.

Tambièn posaron para los medios gráficos los presidentes de la Comisión y del Parlamento europeos, Romano Prodi y Pat Cox, respectivamente, y el alto representante de la política Exterior de la UE, Javier Solana.

En la última fila, en el centro, el presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, conversó mientras duró el acto con su colega eslovaco, Mikulas Zurinda.

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Entre los periodistas se llegó a bromear con el hecho de que Zapatero, el canciller alemán, Gerhard Schroeder, y Chirac, cada uno en un peldaño, estuviesen perfectamente alineados, ganándose el calificativo del "eje franco-germano-español", en alusión al giro del nuevo Gobierno español en política exterior. Después llegó la ceremonia de izado de las 25 banderas y de la bandera de la Unión.

Los Veinticinco celebrarán una cena de gala en Farmleigh House para concluir un día calificado de histórico para el futuro de Europa.

"CIEN Y MIL VECES" BIENVENIDOS

Por la mañana, el presidente del Consejo Europeo y primer ministro irlandés, Bertie Ahern, dieron "cien y mil veces" la bienvenida a los diez países que hoy se incorporaron a la UE para formar el grupo de los Veinticinco.

En una conferencia de prensa celebrada en Dublín junto a los presidentes de la Comisión, Romano Prodi, y del Parlamento Europeo, Pat Cox, Ahern, anfitrión de la nueva Europa, ofreció "la mano de la amistad" a los nuevos miembros en la jornada que "marca el triunfo de su tenacidad y su perseverancia sobre el legado de la historia".

"Hoy -añadió-, abrimos las puertas a la gran familia europea y les damos, en la mejor tradición irlandesa cien y mil veces la bienvenida".

Irlanda, presidenta de turno de la UE, ha organizado un programa festivo bajo el lema "Día de la bienvenida" para acoger a los diez países que se incorporan a la Comunidad: Polonia, la República Checa, Hungría, Eslovaquia, Eslovenia, Lituania, Letonia, Estonia, Malta y Chipre.

REUNIFICACIÓN SESENTA AÑOS DESPUÉS

El ingreso de diez nuevos Estados miembros convierte en realidad la reunificación de Europa casi sesenta años después del final de la Segunda Guerra Mundial.

Esta ampliación es la quinta desde que echó a andar la construcción europea con el Tratado de la CECA (Comunidad Europea del Carbón y del Acero), en 1952.

Los nuevos estados miembros tienen una renta 'per cápita' situada entre los 6.600 dólares de Lituania y Letonia y los 18.500 de Chipre, en todo caso muy por debajo de la media de los actuales Quince, que es 22.500 dólares.

Sus enormes necesidades en infraestructuras y su sistema productivo, predominantemente agrario, amenazaban con desbordar el presupuesto de la Unión.

Antes de que se incorporaran los nuevos miembros, los Quince tuvieron que acometer la reforma de las dos políticas comunitarias más costosas, la agrícola y la regional.

75 MILLONES DE NUEVOS COMUNITARIOS

Los diez nuevos Estados miembros suman 75 millones de personas, con lo que en total, la Unión Europea tendrá 455 millones de habitantes. El producto interior bruto de los nuevos integrantes es un 40% inferior al de los Quince. Eso significa que serán los primeros en la lista a la hora de percibir ayudas económicas de Bruselas.

Ocho de los diez nuevos integrantes de la Unión fueron estados comunistas. Algunos ni siquiera eran países hace diez años. La mayoría de los diez nuevos integrantes de la Unión Europea estaban bajo dominación de la URSS hace tan solo quince años.

En términos absolutos, el gasto total de la UE para la ampliación rondará los 69.500 millones de euros. En términos relativos, este coste no es muy elevado teniendo en cuenta que los gastos para la ampliación en 17 años apenas llegarán al 1% del PIB de la UE en 1999 (0,05% anual).

Además, el Tratado de Adhesión que entrará en vigor esta medianoche incluye disposiciones para el pago escalonado de las ayudas agrícolas y numerosas medidas transitorias que harán más digerible para los nuevos socios el coste de la reunificación.