Pasquall Maragall, elegido nuevo presidente de la Generalitat

Barcelona

El candidato socialista Pasqual Maragall ha sido elegido hoy presidente de la Generalitat en el Parlamento de Catalunya al contar con la mayoría absoluta de los votos (74 votos a favor y 61 en contra). Maragall ha dicho que quiere ser "el presidente de todos" y "superar todo lo que ha hecho CiU".

Pasqual Maragall ha reunido los votos favorables de PSC, ERC e ICV-EUiA, formaciones que han suscrito un pacto para gobernar juntas en la Generalitat, mientras que CiU y el PPC han votado en contra y pasarán a la oposición.

El líder del PSC, que se ha convertido en el 127 presidente de la Generalitat, necesitaba tener 68 votos para ser elegido por mayoría absoluta en primera votación, por lo que ha dispuesto del apoyo de 6 diputados más de los que eran imprescindibles.

"EL PRESIDENTE DE TODOS"

El nuevo presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, se comprometió hoy, tras recibir el apoyo de la mayoría absoluta del Parlament, a ser "el presidente de todos" y a "emplearse de todo corazón" en la tarea de "superar todo lo que ha hecho CiU".

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Tras ser investido 'President', Maragall se dirigió a la Cámara "sin euforia ni autocomplacencias" y con la única intención de "constatar que se abre un periodo nuevo y a mí me toca presidir el inicio". "Me emplearè de todo corazón", dijo. "Quiero ser el presidente de todos y lo serè", añadió en "los segundos 25 años de la autonomía catalana".

Maragall reconoció el "punto de tristeza de la minoría", pero reivindicó el "orgullo" de los nacionalistas catalanes por su "papel decisivo". "Ustedes han conducido el barco hasta aquí, quizá no cómo queríamos, pero sí con gran dignidad. Nadie se lo podrá negar".

MAS: UN PUNTO DE VERGÚENZA

El jefe de filas de CiU, Artur Mas, durante su intervención en el debate de investidura de Maragall como president de Cataluña, pidió al socialista que "mantenga la dignidad de la presidencia de la Generalitat", ya que ve con "un punto de vergüenza" que dé un "gran poder" al futuro "conseller en cap" (Carod Rovira).

Artur Mas acusó a Maragall de otorgar poder a los republicanos como única forma de poder acceder al cargo "una persona que ha perdido las elecciones". Maragall le respondió que no debe por qué preocuparse, ya que seguirá "el camino trazado por Jordi Pujol" al convertirse en "presidente de un país" y no sólo de una institución.

El nuevo líder de la oposición advirtió también de que CiU será "beligerante en el cumplimientos de los compromisos" en la reforma del Estatuto y de la financiación autonómica, terreno en el que piensa "marcar el nivel de ambición" aprovechando "a fondo" el "compromiso" del PSOE y de José Luis Rodríguez Zapatero de avalar el nuevo Estatuto que salga del Parlament.

CAROD: "ES UNA ESTRATEGIA DE FUTURO"

En su intervención, el líder de ERC Josep Luis Carod-Rovira, justificó la decisión de su grupo de apoyar la investidura de Maragall porque Esquerra "no quiere que Cataluña sea como Euskadi o como Québec", un país instalado en el empate infinito entre nacionalistas y no nacionalistas.

Rovira explicó que la formación a la que representa ha hecho una apuesta estratégica de futuro, que nadie los condene de antemano y que se espere al final de la legislatura para pedirles cuentas.

El futuro conseller en cap recordó el objetivo del tripartito, un nuevo Estatuto "de todos" para Cataluña y advirtió de que si Madrid cierra las puertas al texto consensuado en Cataluña el pueblo será llamado a una "consulta general".

MENOS LIBERTAD, SEGÚN PIQUÉ

El presidente del PP de Catalunya, Josep Piquè, denunció que el nuevo gobierno está "subordinado" al "radicalismo" de ERC e ICV y supondrá "más impuestos, más rigideces, más intervencionismo y más sectarismo". "Menos libertad", dijo Piquè resumiendo. Después, preguntó a Maragall si con el pacto de gobierno tripartito el PSC "reniega" del PSOE.

Piqué denunció "anomalías" en el proceso de negociación del gobierno de izquierdas al "subordinar el interés general a los intereses de partidos". Asimismo, criticó la "devaluación increíble" de la figura del Presidente de la Generalitat, por lo que exigió a Maragall que "diga si mandará o dejará que pase lo que todos vemos: que han cedido el poder real a ERC".