Robert Duvall recoge el Premio Donostia como "un gran honor"
El actor norteamericano, Robert Duvall, recibió hoy el Premio Donostia del Festival de San Sebastián, de manos de otro gran actor, el hispano-argentino Federico Luppi, con quien comparte su pasión por el tango y la interpretación. El veterano actor agradeció el galardón y dijo en español que era "un gran honor" recibir este premio.
Una larga ovación del público presente en el Kursaal cerró el acto, en el que Duvall se mostró emocionado por la cálida acogida y aseguró que "de niño" no hubiera podido ni imaginar que iba a estar hoy en San Sebastián.
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El festival le concede el premio como homenaje a una trayectoria profesional que incluye más de 80 películas como actor, cuatro como director y tres como guionista. La actriz francesa Isabelle Hupert y el estadounidense Sean Penn también recibieron en los últimos días ese mismo galardón.
Duvall, de 72 años, ha interpretado más de 80 películas, entre las que aparecen El Padrino (1972), El gran Santini (1979), El mejor (1984), Colors-colores de guerra (1988) o Acción Civil (1998).
PROTAGONISTA Y DE REPARTO
De El Padrino, el actor estadounidense indicó que "fue el catalizador para mi carrera y para la de todos los actores que participamos en ella", al tiempo que expresó su admiración por su director Francis Ford Coppola, con quien despuès ha trabajado en diversos filmes.
Candidato en varias ocasiones al Oscar por sus trabajos en El gran Santini, Gracias y favores, Camino al cielo o Acción civil, Duvall subrayó que no le importa hacer papeles de actor secundario y valoró la labor de los actores de reparto.
El actor estadounidense, que en 1984 ganó el Oscar al mejor actor por Gracias y favores, estará tambièn presente en la clausura mañana, sábado, de este festival, que proyectará su último trabajo Open Range, un "western" del que Kevin Costner es director, actor y productor.
ACTOR, NO POLÍTICO
Duvall se mostró muy lejos de los críticos puntos de vista de Sean Penn con el Gobierno de EEUU. Fue tajante y señaló que no ha venido a España "para participar en un debate político". "No comparto casi ninguno de los puntos de vista de Sean Penn" dijo, y añadiño: "Los actores no somos políticos y no tenemos información sobre todo lo que pasa".
El actor fue más allá, al asegurar que ha oído a algunos actores de Hollywood "hacer declaraciones proféticas y profundas que me avergüenzan". "Tengo mi visión personal de las cosas, pero no estoy aquí para cambiar el mundo ni para ser el secretario de Estado de mi país", añadió.