El Parlamento vasco reitera que no disolverá al grupo sucesor de Batasuna pero deja de pagarle

VITORIA

La Mesa del Parlamento Vasco se ha ratificado esta mañana en la "imposibilidad legal" de cumplir las medidas propuestas por el Tribunal Supremo para disolver al grupo de Sozialista Abertzaleak, la antigua Batasuna, aunque decide acatar la orden del de no pagar las ayudas a este grupo.

Bajo la presidencia de Juan María Atutxa (PNV), Carmelo Barrio (PP), Manuel Huertas (PSE-EE), Gorka Knorr (EA) y Kontxi Bilbao (IU/EB) se han reunido para tomar alguna decisión en torno a la disolución del grupo parlamentario de Sozialista Abertzaleak, ordenada por el Supremo.

En el auto de este tribunal remitido a la cámara de Vitoria, se requiere al presidente del parlamento autonómico, miembros de la Mesa y presidentes de Comisiones Permanentes "para que en lo sucesivo, bajo responsabilidad personal para el caso de incumplimiento, actúen en pleno acatamiento de lo judicialmente decidido el 20 de mayo de 2003, y en consecuencia impidan la presencia del grupo disuelto" y su actuación en la vida parlamentaria.

Hoy, en respuesta a este escrito, la Mesa ha redactado un texto de tres folios en el que insiste en que la disolución de un grupo no está contemplada en el reglamento de la Cámara y por tanto se ratifica en la "imposibilidad legal" de cumplir el auto.

Ante esta situación, la Mesa considera que han sido "abocados a un verdadero conflicto jurídico", y tratará de encontrar un "cauce jurídico para su defensa", impulsando "cuantos recursos jurídicos con una mínima viabilidad procesal se encuentren en el ordenamiento".

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Desde que el Parlamento Vasco recibió este último auto, los parlamentarios de Sozialista Abertzaleak han seguido participando en los diferentes debates y reuniones, tanto en comisión como en pleno, como miembros de dicho grupo.

El Parlamento no pagará los 30.000 euros de subvención a Sozialista Abertzaleak, decisión que tomó tras anunciar el interventor de la Cámara la pasada semana que "en su defensa y salvaguarda" no abonaría estas cantidades, ya que el Supremo exigió a este funcionario que dejase de pagar este dinero bajo su "responsabilidad personal".

A finales de la pasada semana el interventor del Parlamento le remitiera un escrito en el que anuncia que no va a pagar los 30.000 euros que hasta ahora recibía mensualmente Sozialista Abertzaleak como subvención al grupo.

El funcionario de la Cámara explica en su escrito que ha tomado esta decisión "en defensa y salvaguarda" de su "responsabilidad personal" tras el auto del Tribunal Supremo del 18 de junio en el que, entre otras cosas, exigía que se dejasen de pagar las

subvenciones a este grupo.

Junto con su decisión de dejar de pagar ya la mensualidad de junio, el interventor anunció a la Mesa que va a solicitar al portavoz abertzale Arnaldo Otegi que reintegre al Parlamento las cantidades percibidas desde el 20 de mayo pasado.

El Tribunal Supremo, en su auto del 18 de junio, ordenaba al interventor que realizara las actuaciones oportunas para que se devuelvan "cuantas cantidades hayan sido entregadas al referido grupo disuelto a partir del día 20 de mayo de 2003, así como para que se abstenga de abonarle cantidad alguna en lo sucesivo, todo ello bajo apercibimiento de responsabilidad personal".

ACTITUD OBSTRUCCIONISTA

El auto del Supremo calificaba de "obstruccionista" la actitud del presidente de la Cámara vasca, Juan María Atutxa, y de la Mesa del Parlamento. Ante esta actitud, el pasado día 20 la Fiscalía General del Estado presentó una querella ante el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco contra Atutxa, Knorr y Bilbao al considerarles coautores de un delito de desobediencia.