Ocio y cultura

Desde el siglo XVII rimando desde el campanario: así son los repiquetes de Autol

Una tradición que se repite en la localidad catona cada 4 de febrero por Santa Águeda

Los repiquetes de Autol: desde el siglo XVII rimando desde el campanario

Los repiquetes de Autol: desde el siglo XVII rimando desde el campanario

11:26

Compartir

El código iframe se ha copiado en el portapapeles

Autol

En Autol no tienen miedo al frío ni vértigo a las alturas. Cada 4 de febrero lo demuestran con una curiosa tradición que, con mucho empeño, los catones se encargan de mantener viva.

Son los repiquetes, un volteo de campanas acompañado de una dedicatoria para familia, amigos o entidades, por ejemplo... "Son como las canciones dedicadas de la radio, voceadas desde el campanario de una iglesia, en verso y con rima". En A Vivir La Rioja hablamos con Juan José Varea, el encargado de cantarlos cada año desde lo alto de la iglesia de Autol.

Durante los días previos a la fecha se recogen las dedicatorias de estos repiquetes en honor a Santa Águeda y se componen unos versos con una estructura particular. Varea lleva 17 años rimando estas particulares dedicatorias... "la gracia es darle algo de asunto a cada repiquete con la intención del que lo solicita pero sí, hay algo de ritmo jocoso, agradable y con una miaja de picante, en algunos de ellos".

Un ritmo jocoso que se advierte ya desde el primer repiquete, siempre dedicado a Santa Águeda con esta misma tonadilla. "Este repiqueteeeeee, para Santa Águeda, abogada de los pechos, para que nos los conserve duros y bien tiesos". El segundo siempre es por San Blas, "para que nos cuide la garganta y no tosamos más".

Una curiosa tradición que hace que los catones salgan en pleno mes de febrero a la calle a las 10 de la noche, "con un frío que pela" para escucharlos voceados desde la iglesia en lo alto del pueblo. Con todo, también es posible oírlos ya en directo en la radio local de la localidad con algo menos de frío.

Tradición del siglo XVII

Una tradición que viene desde el siglo XVII y que ahora recae en la Cofradía del Santísimo Sacramento de Autol que se encarga de la infraestructura, de atar las campanas de una forma determinada y de la recogida de los repiquetes, que tienen cada año un destino solidario. El trabajo de rimar las dedicatoria recae en Juanjo. "No es un trabajo excesivo y lo demás está repartido con la cofrafía", dice con gratitud.

Sin embargo reconoce Varea que "cuesta que las generaciones nuevas se sumen y participen". No en vano hace diez años se recogían hasta 140 repiquetes y este año se han encargado 70 "pero nos empeñamos en seguir estas tradiciones", como dice la tonadilla que nos ha dedicado en esta ocasión: "este repiquete para el programa A Vivir La Rioja de la Cadena SER. Por dar voz a nuestros pueblos y que las tradiciones no se vayan a perder".

Recibe toda la información de Radio Rioja en nuestro canal de WhatsApp.

 
  • Cadena SER

  •  
Programación
Cadena SER

Hoy por Hoy

Àngels Barceló

Comparte

Compartir desde el minuto: 00:00