Ancelotti no rota y el Real Madrid exhibe su pegada en la Champions League

El Real Madrid certifica su pase a los octavos de final como primero de grupo tras ganar al Inter (2-0). Pese a las pocas rotaciones, los de Ancelotti se impusieron gracias a su efectividad con los goles de Kroos y Asensio.

Los mejores momentos

El Real Madrid no se jugaba tanto como sí se lo jugaba el Atlético de Madrid en Oporto, pero sí era un partido importante de cara al futuro del club en esta edición de la Champions League. Pese a ello, la lógica relajación dl que le van las cosas bien hacía que este encuentro, para los de Ancelotti, no fuese para tanto. En cambio, para el Inter, era una final, tal y como se vio en la piña previa al pitido inicial. Habían venido a conquistar el Bernabéu, el campo que les vio levantar su última Copa de Europa con José Mourinho a los mandos hace más de una década.

Esa tensión competitiva de los italianos se notaba. Salvo dos buenas ocasiones para los locales generadas desde la banda del incombustible Vinicius, el Inter se hizo dueño y señor del partido. Los de Simone Inzaghi, el hermano del sempiterno goleador Filippo Inzaghi, llegaban también con una buena inercia, ganando todos los duelos en el medio y haciendo que el Madrid retrocediese cada vez más, planteando un panorama desfavorable para los incombustibles centrocampistas locales, dejando a un brillante Brozovic manejar el tempo del partido a su antojo.

Lo que no sabía el Inter, quizás por sus largos de ausencia en la máxima competición de clubes en el viejo continente, es que el Madrid, cuanto peor está, más peligroso es. Modric comenzó la jugada, abriendo el balón para Rodrygo. El brasileño buscó encontrar un socio por el medio, haciendo un tenso pase hacia la zona central. Casemiro, consciente de que cerca de la frontal no es su sitio, dejó pasar el balón para que el balón le cayese a Kroos; y el alemán, como si fuese fácil, puso el balón en la cepa del poste para poner el 1-0 en el minuto 16. El Madrid, una vez más, se hacía grande en la adversidad.

Así comenzó un periodo de cambio en el partido, ya que el Inter dio un paso atrás para compactarse más en el medio y frenar el fútbol del trío de centrocampistas blancos. En el intercambio de golpes que se venía, más frenético, el Madrid tampoco se encontraba cómodo. Pese a ello, tal y como sucedió en los primeros compases, los de Ancelotti se manejan igual en la incomodidad. Llegó de esta forma el segundo zarpazo de los locales, con Kroos de protagonista de nuevo, aunque esta vez de asistente para un remate de Rodrygo que acabó en el palo. Los de la capital se iban al descanso ganando y daban la sensación de tener controlada la situación pese a los 13 remates del Inter en la primera mitad, récord negativo para el Madrid en esta campaña.

Como acabó la primera parte, comenzó la segunda. El Inter seguía atosigando a los locales con su buen juego exterior, siendo Perisic el gran canalizador del juego por la izquierda. El Madrid sabía que tenía que cerrar el partido cuanto antes, esperando así una nueva ocasión que no llegaba pese al buen trabajo de Jovic contra los centrales italianos. Mientras llegase, podían aguantar con un imperial Militao, que estaba volviendo a cuajar un gran partido defendiendo el área.

Pese a ello, los de Ancelotti no tuvieron que hacer nada. La frustración se empezó a apoderar de los jugadores del Inter, acabando sus opciones en el partido con la expulsión de Barella tras un rifirrafe con Militao en el que el italiano perdió los papeles. De esta forma, con el Inter limitándose a que pasasen los minutos, el Madrid encontró su ansiado gol para cerrar el partido gracias a un gran tanto de Asensio en el 79 que recordaba los mejores momentos del mallorquín en Madrid. Con el final del partido, se confirmó el pase a octavos como primero de grupo de los de Ancelotti, evitando así a algunos de los cocos de la competición y dándole la razón al técnico italiano un día más en cuanto a su decisión de no rotar.

Los goles

El tanto de Toni Kroos

El gol de Marco Asensio