Videollamadas al alcance de todos: "Sólo con darle a un botón ya pueden ver a sus familiares"

Madrid

Cuando, en el mes de marzo, la población española, al igual que la de la mayoría del planeta, se vio obligada a confinarse, las videollamadas se erigieron como la herramienta predilecta para mantener el contacto con los demás y poder seguir viendo, aunque sea a través de una pantalla, a nuestros seres queridos. Sin embargo, los más mayores, precisamente aquellos que más necesitaban el contacto con el prójimo, se vieron apartados de este instrumento debido a la brecha tecnológica que les separa de una sociedad híper informatizada.

Una vez más, como ha sido costumbre a lo largo de este desafortunado año, la solidaridad ciudadana hizo acto de presencia para tratar de paliar esta situación. Durante los meses de confinamiento, un grupo de desarrolladores de software libre, voluntarios, ex-alumnos y profesores de la Universidad Politécnica de Madrid llamado TEDECO (Tecnología para el Desarrollo y la Cooperación) puso en marcha una iniciativa para crear un servicio gratuito de videollamadas de fácil manejo y adaptado para aquellas personas que no tienen conocimientos digitales previos. ‘Videollama.me’ es el nombre de su proyecto.

Susana Muñoz Hernández, profesora de la UPM y directora del equipo, ha pasado hoy por los micrófonos de La Ventana para explicarnos cómo surgió este proyecto. Según nos ha contado, “la idea nació en el primer confinamiento”. Cuando tuvimos que quedarnos en casa, y todo el mundo empezó a usar las videollamadas, los integrantes de TEDECO vieron que los más mayores se estaban quedando fuera. “Nuestra especialidad es la alfabetización digital”, cuenta Susana, “acercamos a las personas a la tecnología y, además, facilitamos el funcionamiento de las aplicaciones”.

‘Videollama.me’, está ideado “para que sea lo más sencillo posible, y para que las personas que no están muy familiarizadas con la tecnología también puedan hacer videollamadas”. Susana nos ha explicado el fácil funcionamiento de su aplicación: “a través de la web, se descarga la App o se crea un icono en el escritorio. Únicamente con pulsarlo, el dispositivo entrará en la videollamada, sin peligro de deshabilitar el audio o el micrófono tocando alguna parte de la pantalla”.

Hasta que las videollamadas puedan volver a ser reemplazadas por visitas y abrazos, las iniciativas como la que TEDECO ha puesto en marcha son la mejor manera de acercarnos a los más mayores, y evitar que les atrape la otra pandemia: la soledad. Una vez más, la solidaridad ciudadana es la que pone un parche de generosidad a los muchos boquetes que este año ha abierto en nuestro día a día.

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