El curioso Pérez Galdós
En el mundo de Galdós caben todos y termina siendo un mundo que siempre merece la pena intentar cambiar
Madrid
Andrés Trapiello dijo de Galdós una frase muy hermosa: "Era un forofo de la vida". La dijo este mes de febrero, imagínate el sentido que tiene ahora. Porque su curiosidad se puso siempre al servicio de sus personajes, y esos personajes han configurado una historia de España y de su paisaje humano difícil de igualar. Desde el punto de vista periodístico probablemente no haya habido cronista más fiel a la realidad y más objetivo en el plano moral de su tiempo que él. Cuánto dice de España Doña Perfecta, por ejemplo. Galdós demuestra que no se puede contar una época marginando la vida de quien no puede contarla. Tú utilizabas dos palabras: desamparo y desconcierto. Muchas veces, las mejores veces, el escritor es más valioso cuando por encima de la percepción de sí mismo como artista, se sitúa la percepción de sus personajes, o sea el mundo que tiene alrededor. El mundo en el que caben todos, y que termina siendo, si se describe con realismo, un mundo que siempre merece la pena intentar cambiar.
Manuel Jabois
Es de Sanxenxo (Pontevedra) y aprendió el oficio de escribir en el periodismo local gracias a Diario...