Santiaguinas

Madrid

Una vez, cuando el Madrid estaba jugando un partido horrible, el presidente Santiago Bernabéu bajó al vestuario en el descanso y les pegó un broncazo horrible a todos. El Madrid remontó después del descanso y esas visitas muy puntuales de Bernabéu en partidos horrendos se siguieron repitiendo con un nombre: "santiaguinas". Las santiaguinas de Pedro Sánchez no son violentas pero tienen la misma motivación: la remontada. La diferencia entre Bernabéu y Sánchez es que Bernabéu subía al palco y Sánchez sale al campo a tratar de remontar en la segunda parte el partido que perdió en la primera. Yo entiendo que el escenario es propicio para grandes discursos pero hace un mes Sánchez dijo que en diciembre esperaba que España empezase a suministrar la vacuna, y ahora se avecinan unos meses durísimos. No es incompatible, lo incompatible es el tono. Más que un coach, necesitamos traductores, rastreadores y una respuesta que nadie, tampoco Sánchez, entre tanta palabra da: por qué, por qué nosotros otra vez.