El trágico final de los hermanos Dalton

A mí si me dices “hermanos Dalton” me vienen a la cabeza Joe, Averell y los otros dos, de los tebeos de Lucky Luke. Pero, como unos cuantos de los personajes creados por Morris y Goscinny, estaban basados en una familia de forajidos que existió realmente en el Salvaje Oeste de finales del siglo XIX. Y el 5 de octubre de 1894 fue un día fatídico para los Dalton de carne y hueso.

Los Dalton no tuvieron unos inicios muy felices. Su padre abandonó a su madre con 15 hijos, y no puedo ni imaginar cómo consiguió la pobre mujer alimentarlos a todos. Al ir creciendo, varios de los hermanos empezaron a ganarse la vida como agentes de la ley, pero se fueron inclinando lentamente hacia el crimen, principalmente el robo de caballos. De ahí pasaron a atracar trenes, casas de apuestas y bancos. Los cuatro hermanos que más crímenes protagonizaron fueron Grat, Bill, Bob y Emmett.

El 5 de octubre de 1892 fueron a atracar un banco en Coffeyville, en el estado de Kansas. Pero una vez en el pueblo, fueron reconocidos y un grupo de ciudadanos armados los esperó a su salida del banco. Tanto Grat como Bob murieron allí mismo, mientras que Emmett, el más joven, fue herido y enviado a la cárcel, donde pasó 14 años. El hermano afortunado, Bill, no estaba presente en ese atraco, pero no le duró mucho la suerte. Un par de años más tarde, le dispararon en el porche de su casa mientras jugaba con su hija. Como podéis ver, una historia bastante menos graciosa que la de los archienemigos de Lucky Luke.