Juan Pujol, Garbo: el espía español que engañó a los nazis

Madrid

¿Qué lleva a un joven de 28 años, recién terminada la Guerra Civil, a presentarse en la embajada británica en Madrid y ofrecerse como espía? ¿Y cuando le rechazan, insistir hasta lograrlo?

Terminamos esta temporada del programa con uno de los personajes más insólitos, desconocidos y trascendentes de la historia de nuestro país. Juan Pujol fue un doble agente durante la Segunda Guerra Mundial. Los nazis creían que espiaba para ellos, pero en realidad trabajaba para los británicos. Fueron ellos quienes le pusieron su mote: Garbo, porque decían que era el mejor actor del mundo. Inventó toda una red de informantes para engañar a los alemanes y, gracias a su actividad, consiguió que el desembarco de Normandía fuera un éxito, y el principio del fin de la guerra. Vivió en el exilio la mayor parte de su vida, siempre ocultando el papel tan importante que había tenido en la historia del siglo XX.

Sus hijos vivieron hasta la madurez creyendo que Pujol había muerto. En este programa su hija, María Kreisler, que hoy en día gestiona www.garboespia.com, una página web sobre la extraordinaria historia de su padre, nos cuenta cómo fue el reencuentro con él y nos explica el importante papel de su madre, Araceli, en toda esta historia. Y el profesor de la Universidad de Santiago Emilio Grandío, especialista en espionaje británico durante la Segunda Guerra Mundial, nos ayuda a poner en perspectiva cuál fue exactamente el papel de Garbo.