Patriotas de verbo
Madrid
Estos patriotas de verbo que dirigen la ultraderecha no se avergüenzan de haber vivido de la subvención de una organización ilegal iraní. La información la publicó José María Irujo en El País. En condiciones normales, en un país acostumbrado a pedir cuentas a aquellos que se comportan como gamberros en el Parlamento y en la vida, esos líderes políticos soliviantados explicarían a qué los obliga la dependencia de ese dinero. Pero callan, porque su relación no es con la democracia sino con la mala educación política.