Rodar, rodar, rodar

Madrid

En la ciudad de Veracruz, la misma por la que entraron los hombres de Hernán Cortés en México, investigadores del conocido MIT (Instituto Tecnológico de Massachussets) hallaron restos de caucho que tenían más de tres mil años en 1999. Era el material con el que se hacían unas bolas de un kilo que asombraron a los españoles porque parecían estar "vivas" al botar y rebotar.

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Para los españoles que regresaron llevando en sus barcos algunos jugadores que mostrarían su habilidad ante el emperador Carlos V, el juego más popular era el de los bolos, practicado con profusión ya en el siglo XVII en España, particularmente en Cantabria. Los juegos con bolas y pelotas parecen ser el más antiguo del que se tiene conocimiento y Carlos López-Tapia da comienzo al audio con la fabricación de la bola más sofisticada que se produce en la actualidad.

En el ático de la estación de ferrocarril de Chamartín, en una de las mejores boleras de nuestro país, la jugadora de bowling Teresa Barriopedro da una clase magistral a Isabel Bolaños, que se inicia así en la modalidad más cinematográfica de bolos... en homenaje a la primera película escrita por los hermanos Cohen hace 25 años, El gran Lebobsky, creadora de un culto que supera al "Jedismo" de Starword y al "matrixmo" de Matrix.

En el estudio nos acompañan Rafael Moreno, presidente de la Federación Madrileña de bolos y Alfonso Azpiazu que preside la Peña más antigua de la ciudad en la especialidad española por excelencia: el bolo palma.

Tras un buen momento en los años ochenta, no destacamos entre potencias asiáticas y americanas. El bowling aspira a convertirse en un futuro cercano en deporte olímpico.