Carmen Calvo le pide a Podemos "que deje de enredar con nombres"
Calvo ha evitado pronunciarse sobre la posibilidad de que Irene Montero asuma una vicepresidencia
La vicepresidenta del Gobierno en funciones Carmen Calvo.(CADENA SER)
Madrid
La vicepresidenta del Gobierno en funciones, Carmen Calvo, confirma que, tal y como había apuntado Pedro Sánchez este jueves, la presencia de Pablo Iglesias en el Consejo de Ministros obstaculiza la formación de un ejecutivo del PSOE en coalición con Podemos. Calvo le ha pedido a la formación morada "que deje de enredar con nombres" y ha recordado que "el presidente ha dejado muy claro que no puede tener al líder de otra formación política" en el Gobierno.
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Calvo ha evitado pronunciarse sobre la posibilidad de que sea Irene Montero quien entre en el Gobierno como vicepresidenta y ha destacado que el PSOE ha ido variando su posición y que, "siendo ponderados y generosos", llegó a ofrecer la entrada de "miembros de Unidas Podemos con cualificación". Pero tampoco ha querido confirmar si Irene Montero encaja en ese perfil.
Preguntada en Hora 25 sobre la consulta de la formación morada, Calvo se ha limitado a decir que ahora la dirección de Podemos tendrá que administrar los resultados. "La gente quiere que haya gobierno. Que aprovechemos estos cuatro años", ha dicho. "Creemos en la democracia representativa".
Carmen Calvo también ha criticado la decisión de la parlamentaria de Unidas Podemos en La Rioja que ha impedido la investidura de la candidata socialista, pero ha asegurado que PSOE y Podemos podrían sellar numerosos acuerdos en materia de políticas de igualdad, gobierno feminista, pacto contra la violencia machista, política de vivienda, algunos ejes de la emergencia climática y leyes que afectan al modelo productivo y la transición ecológica, y la reforma laboral.
"Ojalá hubiéramos podido avanzar en programa y medidas concretas [...]. Lo único que sabemos es que el señor Iglesias reta a una especie de careo", ha dicho la vicepresidenta, recordando también que el líder de Podemos quiere ser vicepresidente del Gobierno desde 2016. "Lo que está en juego es la gobernabilidad de la nación, de uno de los grandes países de Europa".
