Unidas perdemos
Rivera, en vista de que no consigue liderar la oposición ni con el PP tirado en la lona y al borde del KO, parece dispuesto a jugar el papel de bisagra con quien le asegure un trozo de moqueta
Mientras los populares se afanan en encontrar una brújula que les permita iniciar la travesía del desierto, Ciudadanos no sabe muy bien si la suya marca el este o el oeste tras su nuevo fracaso de intento de sorpasso a los de Casado. Rivera, en vista de que no consigue liderar la oposición ni con el PP tirado en la lona y al borde del KO, parece dispuesto a jugar el papel de bisagra con quien le asegure un trozo de moqueta que, en definitiva, es el que llevan otorgándole los españoles desde 2015. No faltan voces entre los populares que recomiendan a su líder no forzar los pactos, aguantar el tirón y esperar a que una parte significativa de sus votantes huidos a Ciudadanos, vayan regresando si se consuman acuerdos con los socialistas y se frustran las expectativas creadas de desalojo de la izquierda en lugares emblemáticos como la ciudad de Madrid, donde por cierto Iglesias se ha pegado un batacazo monumental. Entre el PSOE y Errejón van a llevar a Unidas Podemos a convertirse más temprano que tarde, en Unidas Perdemos.