Los fiscales y el azar

Quiere el azar que se produzca una conjura fatal. Por un lado, el conocimiento público de que la fiscalía del Supremo ha decidido mantener sus acusaciones de rebelión y malversación: los dos peores presuntos delitos por los que se juzga a la mayoría de los procesados independentistas catalanes.

Por otro lado, la peor actuación de uno de sus miembros, justo en el momento en que empezaba una fase muy importante del juicio oral, las pruebas documentales. Mostró muchos videos favorables a los reos: a los Jordis llamando a una movilización pacífica. A la Guardia civil y la Policía Nacional arreando sin haber sido provocados.

Les tocará decidir a los magistrados y aventurarse es una aventura, pero la impresión que atravesaba el palacio de las Salesas era que resulta difícil compaginar los delitos más graves con actuaciones en general no violentas. ¿Qué hubo desórdenes, altercados, violencias en distintos sitios? Es innegable. Que sirva para configurar una rebelión, habrá que verlo.