Una jactancia inútil
Madrid
Uno de los más jóvenes de los partidos políticos presume tanto de salud que en los últimos meses se distingue por la construcción de muros o cordones sanitarios para alejar de su cercanía a los indeseables. Ayer, además, instó a esos indeseables a renegar de sus líderes para así entrar en el reino de sus cielos. Presumir de salud es una jactancia inútil, porque la vida misma va encargándose de poner en su tiempo y en su sitio los cuerpos e incluso las almas, y un día necesitaremos incluso a aquellos que están al otro lado del cordón que hayamos querido imponer.