Carlos Blanco: "El sistema educativo es imperfecto, así que decidí seguir sus reglas pero crear mi propio sistema"

Madrid

¿La inteligencia debería hacernos más felices? Porque a priori desmotivados, aburridos o desconectados no son calificativos que deberían asignarse a personas con un alto cociente de inteligencia. Y sin embargo, en ocasiones, estas mentes privilegiadas son personalidades destinadas a la incomprensión, el fracaso y el aislamiento que genera lo diferente.

Así podrían señalarlo estadísticas del ministerio de Educación, cuando asegura que hasta el 60% de los niños con altas capacidades pueden estar abocados al fracaso escolar... Y eso que de los más de ocho millones de alumnos que hay en nuestro país, sólo se tienen identificados a poco más de veintisiete mil con estas características..

Por eso hoy ponemos el foco en los superdotados. Una realidad que conoce muy bien Carlos Blanco, escritor y profesor universitario consciente de serlo desde muy joven... Carlos Blanco es uno de los ejemplos más conocidos de niño superdotado en nuestro país. Y no por saber más de cinco idiomas o tener el mismo cociente intelectual que Einstein, Stephen Hawkins o Bill Gates. Sino por haber formado parte de nuestro paisaje mediático gracias a su colaboración en un programa como Crónicas Marcianas hablando de Física, Filosofía o Egipto.