Para Albert Rivera

Madrid

Señor Presidente de Ciudadanos-Partido de la Ciudadanía, su visita a Moncloa, auto investido como líder de la Oposición, ha sido un intento de erigirse en campeón de la clase media y de llevarse por delante a Pablo Casado, el colega pepero al que ha declarado en descomposición, pero de cuya hueste necesitaría apoyos para hacerse con los gobiernos autonómicos y municipales. Al Partido Socialista, el más votado el 28 de abril, le quiere unido a Podemos para combatirle mejor. De modo que ni agua ni abstención para investir a Pedro Sánchez. Cuidado Albert, los excesos se pagan.