El éxito que destruyó a Joe Cocker

Madrid

No hay muchos directos en la historia de la música que hayan sido tan geniales para el público y tan desastrosos para los artistas como la gira de Joe Cocker y sus perros locos de 1970, una gira eterna y agotadora que destruyó a un Joe Cocker que venía de dejar su huella en el rock un año antes. “Hay tres cosas que recuerdo de 1969, el festival de Woodstock, el disco de Led Zeppelin y el disco de Joe Cocker... Así resumo 1969”, llegó a decir Billy Joel.

Joe Cocker, Mad Dogs and Englismen, el álbum en directo que el músico inglés editó en 1970 y fue un álbum doble de versiones grabado en marzo de aquel año en el Fillmore Est de Nueva York. Un disco que captó un momento mágico en la música, una gira de más de 40 músicos, con cuatro baterías, que sonaba como un tren de mercancías cuya carga eran las grandes canciones de esa década. Temas de los Beatles, los Rolling Stone, Otis Redding, The Band o Ray Charles. Un disco con una historia fascinante que sale de una gira, una gira impuesta a un Joe Cocker que estaba exhausto tras un 1969 trepidante y que apenas tuvo ocho días para montar el proyecto.

Tras aquella intensa gira, Cocker estaba agotado pero no podía cancelar, más bien no le dejaron y para esta aventura mastodóntica reclutó a Leon Rusell, un hombre clave en este proyecto, pero un tipo que quizá se aprovechó de la situación asumiendo demasiado protagonismo.

Tras cincuenta conciertos aquella gira histórica acabó en desastre. Los músicos apenas se hablaban y Cocker se había sumergido en el alcohol, una adicción que le acompañó décadas marcando su carrera. Tras el final de la gira, Cocker se escondió en casa de sus padres y no volvió a dar un concierto en tres años, condicionando su carrera. El álbum de esta semana llegó al número 2 en EEUU y es uno de los discos en directo más poderosos que se recuerdan, sin embargo aquella gira derrotó a Joe Cocker.

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