Entre hermanos no se lucha

Madrid

Ismael y Álvaro Déniz rezaban por que la situación no se produjera. La final de la Liga de Gran Canaria llegó con empate 11 a la última luchada, la que debía enfrentarles a ambos.

La escuadra del Estrella había remontado un 11 a 3 gracias a la machada de Álvaro, que había ido derribando a todos sus oponentes, incluido al puntal, el hombre más fuerte, del Unión Galdar. El punto decisivo debían pelearlo Ismael y Álvaro. Sin embargo, en la lucha canaria hay una regla no escrta que dice que "entre hermanos no se brega", es decir, no se pelea.

Ambos habían avisado previamente de que si les tocaba enfrentarse, no lo harían. Lo que nadie esperaba era que el combate coincidiera con un empate a 11 y con el título en juego. El público que llenaba las gradas del terrero presionaba para que los hermanos Déniz bregaran. Hubo tensión y suspense pero finalmente el hermano menor, Ismael, respetó la tradición de su deporte y levantó la mano de Álvaro, renunciando así a una posible victoria de su equipo.