Adiós, Forges
Madrid
Da rabia este febrero. No sé cómo se le pone una orla negra a un mensaje de radio, pero sé qué música hubiera querido Forges. Las clásicas de Mahler que escuchaba para aliviarse de la actualidad. Viven en nosotros sus personajes mezcla inolvidable de Quijote y Sancho. Dibujó los pecados capitales de España. Su lenguaje era tan propio que terminó siendo el de su propio país, que se entenderá menos sin su ojo diciendo qué le duele a este paisaje que llora en febrero.