"Los Gobiernos no se dan cuenta de que la investigación es productiva"

Tenemos a Picasso, a Velázquez y a Javier Bardem, pero de todos, indudablemente Pedro Duque es el español que ha llegado más alto.

El 29 de octubre de 1998, viajó como ingeniero de vuelo número 3 a bordo del Transbordador Espacial Discovery convirtiéndose en el primer astronauta español en viajar al espacio...  Más tarde, en 2003 llegaría una segunda misión esta vez en la Estación Espacial Internacional hasta la que llegó a borde de una nave Soyuz rusa. 

Este año se cumplen veinte años del primer viaje y quince del segundo, y tal y como dice él "igual toca celebrarlo", aunque él prefiere volver al espacio. "Ha pasado tanto tiempo que habrá que pensar en volver... o retirarse."

Duque está harto de responder cómo es ver la Tierra desde ahí arriba, pero nos da algunas pistas con referentes cinematográficos: "Apolo XIII" narra con meticulosidad cómo fue la misión y "Gravity" es bastante realista en cuanto a rutinas y problemas. La que suspende en su examen es "Interestellar" de Christopher Nolan. "Eso de que te bajes y por un agujero negro envejezcas veinte años de golpe es bastante increíble".  

Pedro Duque, pese a no estar en órbita, sigue trabajando en proyectos aeroespaciales en el departamento de  Revisión y control de proyectos futuros de la Agencia Europea. 

Un trabajo de oficina en el que hace cursos, planifica viajes y sigue su rutina física para volver a viajar, "aunque esto no es como lo de los pilotos, que te pueden llamar un día para que vayas al siguiente" nos aclara. 

Un reciclaje necesario, porque los viajes hoy en día no son como los de hace veinte años, "ahora se pasa más tiempo en el espacio, y la preparación necesariamente tiene que ser diferente."

Junto con nuestro experto Javier Gregori, le hemos preguntado por el recorte de inversión que ha anunciado Trump en proyectos aeroespaciales, una decisión que parece, por una vez, imitar a los políticos españoles, que nunca han alcanzado el tres por ciento de inversión solicitado. 

"Es un mal endémico de nuestro país" reconoce Pedro. "Nunca se ha invertido y haría falta un cambio, un golpe de timón que alguien que cambiara la mentalidad." El problema, según Pedro Duque, es que se visualiza como un gasto, pero en realidad la investigación "es una inversión terriblemente productiva, tanto en competitividad como en más puestos de trabajo y mejores salarios."

La inversión lo es todo en la carrera aeroespacial, ya que el conocimiento no es el límite. "Nos preguntan si vamos a llegar a Marte. Yo digo que, si tuviéramos 400.000 ingenieros como en la época del Apolo XIII seguro que sí."

En vista de los recortes públicos, ¿el futuro de los viajes interestelares será el turismo espacial? "cuando veamos la demanda de esos viajes carísimos por cuatro minutos en órbita sabremos si es rentable." En cualquier caso, confiesa que no sabe si esos viajes serán seguros, "pero confío plenamente en el regulador americano".