"No debemos dejar el mundo rural en una postal"

Madrid

"Se nos ha olvidado que somos un país de pastores y campesinos...", dijo José Antonio Labordeta. Contra ese olvido, en Hoy por hoy se han propuesto luchar modestamente este verano. Cada martes, los oyentes viajan a la mal llamada "España vacía", esos territorios entre ciudades en los que parece que nunca pasa nada y, sin embargo, pasan muchas cosas.

En esta ocasión, Macarena Berlín y Toño Fraguas hablan con María Sánchez, una mujer joven, combativa y comprometida. María nació en Córdoba en 1989. Es nieta de veterinario rural, hija de veterinario rural… y heredó el oficio y la devoción. "Lamentablemente, la proporción entre gente mayor y gente joven sigue siendo abismal. Gente mayor cuyos hijos se han ido a la ciudad y no quieren seguir el oficio de sus padres", le contaba a Macarena Berlín.

El campo duerme todavía cuando la veterinaria se levanta y se pone al volante de la furgoneta con la que visita a los ganaderos de las serranías de Córdoba, de Sevilla, de Extremadura, de Portugal. "Voy al campo y me siento muy respetada, como en casa. No me siento apartada, infravalorada… Vuelvo a casa con una sonrisa en la cara". María, además, trabaja con un tipo de cabra muy concreto: la cabra de raza florida. Fue su abuelo quien salvó a esta raza de la extinción en los años ochenta. Se llaman cabras de raza florida porque recuerdan al Valle del Guadalquivir cuando se pone florido en primavera.

María, además de veterinaria, es poeta. Este año ha publicado su primer libro, Cuaderno de campo. Un éxito rotundo que ya lleva cuatro ediciones, aunque la autora advierte que hay que hacer acciones que transformen el medio, tanto en el día a día como en los hábitos de consumo, porque "no debemos dejar el mundo rural en una postal".

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