Del bipartidismo a la ruptura

Madrid

"Normalmente, durante las crisis, los ciudadanos incrementaban su preocupación por los políticos pero hasta ahora eso no venía acompañado del incremento del interés por la política. Esto sí ocurre a partir de 2011, lo que es indicativo de que se estaba gestando un movimiento subterráneo", explica el politólogo Pablo Simón.

Este movimiento, el 15M, estalla en aquel momento y es el precedente de lo que vendrá después: unas elecciones, las de junio del año pasado, que cambiaron el mapa político y acabaron con el bipartidismo reinante. Para Pablo Iglesias, líder de Podemos, "el 15M seguramente reveló lo que era la crisis de un sistema político que abrió oportunidades".

Otro de esos partidos que vio la oportunidad que señala Iglesias y saltó al panorama político nacional fue Ciudadanos. José Manuel Villegas, secretario general de esta formación, explica ya como diputado cómo los viejos partidos pensaban que tenían "patrimonializado" el Congreso de los Diputados, donde ahora conviven cuatro formaciones políticas mayoritarias.

El pueblo independentista

Un pequeño pueblo de la provincia de Barcelona, Sampedor, ejemplifica la evolución de otro gran cambio político: el auge del independentismo. Durante los años 90 gobernó el PSC pero en 2003 una alianza entre Esquerra Republicana y CiU le quitó la alcaldía y no la ha recuperado desde entonces.

En Sampedor las opciones independentista y no independentista conviven sin problemas. Ejemplo de ello son Xavier Codina y Fina Rodríguez, el alcalde y la representante del PSC de Sampedor, que pese a las diferencias ideológicas muestran una imagen de un pueblo unido y más preocupado por los problemas del día a día que por los que se discuten a diario en el Parlament.

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Junto a Sampedor, en la actualidad existen 764 localidades en Cataluña que manifiestan su apoyo a la ruptura con España.

José Montilla, expresident de la Generalitat con el PSC, relaciona este aumento del independentismo con la misma razón que ha provocado el fin del bipartidismo. "Sectores muy importantes de la juventud ven con recelo estas formaciones políticas y optan por cosas que suenan a utopía, cosas más rompedoras o novedosas como Podemos y Ciudadanos en España, y en Cataluña opciones independentistas".

Uno de los compañeros de partido de Montilla durante su mandato, Miquel Iceta, va un paso más allá. Para el secretario general del PSC "la solución al problema independentista tendrá que venir por una reforma constitucional".

Desde el lado independentista, el punto al que se ha llegado era impensable hace 25 años. "Me ha sorprendido la fuerza que ha adquirido el movimiento popular a favor de la independencia de Cataluña", confiesa Alfred Bosch, concejal de Barcelona por Esquerra Republicana.