Hoy por HoyEl editorial de Pepa Bueno
Opinión
LA OPINIÓN DE PEPA BUENO

El PSOE y el CETA

Habrá quien diga que el populismo le marca la agenda a la socialdemocracia. Pero quizás sería pertinente plantearse la pregunta también al revés

Pepa Bueno: 'El PSOE y el CETA'

Pepa Bueno: 'El PSOE y el CETA'

03:02

Compartir

El código iframe se ha copiado en el portapapeles

<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/001RD010000004624442/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>

El PSOE que ganó las primarias y el Congreso federal se presentó como un partido de izquierdas y la izquierda tiene una profunda desconfianza de los Tratados Internacionales de libre comercio porque en la práctica, la globalización ha traído a esta parte del mundo desregulación, pérdida de derechos y pérdida también de la autonomía de la política frente a las grandes empresas y los consorcios financieros. Y en coherencia con este planteamiento, el primer giro del PSOE liderado por Pedro Sánchez ha sido replantear su posición sobre el acuerdo de libre comercio entre la Unión Europea y Canadá, que debe ratificarse en los parlamentos nacionales y aquí toca hacerlo la semana que viene. Del sí que habían planteado los anteriores dirigentes a la abstención que parece que plantean ahora.

Más información

En tiempos de un peligrosísimo resurgir de los nacionalismos, con Trump amenazando con encerrar a Estados Unidos en sí misma, la Unión Europea defiende las bondades del acuerdo: amplía el mercado europeo, elimina aranceles a la mayoría de bienes y servicios, todas las empresas grandes y pequeñas podrán exportar hasta un 20 por ciento más y tendrá un impacto favorable sobre el PIB europeo de 12.000 millones.

Pero este tipo de acuerdos suscita también muchas preguntas e incertidumbres: socava los sistemas nacionales de justicia al permitir tribunales especiales de arbitraje a los que las empresas pueden acudir incluso contra los Estados. Existe una demanda ya contra esta posibilidad ante el Tribunal Europeo de Justicia planteada nada menos que por la asociación de jueces alemanes. Los sindicatos calculan que en lugar de crear empleo, se perderán 200.000. No se recogen derechos de sindicación y negociación colectiva y el comercio transatlántico fomenta el uso del petróleo en tiempos en los que la batalla contra el cambio climático es una prioridad absoluta.

No, no es un asunto fácil ni que se pueda resolver con el trazo grueso. No se trata tanto de demonizar los tratados internacionales como de perseguir que se firmen con controles extremos, respetando la economía social de mercado que ha sido o fue al menos bandera de Europa y respetando también los intereses y derechos de los trabajadores. Porque de igualar por abajo saben mucho nuestros precarios.

Habrá quien diga que el populismo le marca la agenda a la socialdemocracia. Pero quizás sería pertinente plantearse la pregunta también al revés. Si la crisis de los partidos socialdemócratas empezó cuando abandonaron la defensa de cuestiones esenciales para la vida de su electorado que han quedado en manos de los populistas o de los movimientos sociales.

En cualquier caso, el PSOE debe explicar muy bien su posición para que se entiendan las razones profundas de una decisión que modifica un compromiso adquirido por sus propios eurodiputados hace solo unos meses.

 
  • Cadena SER

  •  
Programación
Cadena SER

Hoy por Hoy

Àngels Barceló

Comparte

Compartir desde el minuto: 00:00