Pp, Psoe y Pedro Sánchez

Barcelona

¿Por qué, de pronto, Rajoy y Hernando se han puesto a hablar del PSOE y de Pedro Sánchez? Era tan cómodo el PSOE con la gestora como sordina que les ha sobresaltado que los socialistas recuperen la voz. Sánchez lo tiene claro: el único enemigo a batir es el PP, aunque previamente tendrá que demostrar que el PSOE es el más fuerte a la izquierda. Por tanto, el PP ya no podrá contar con los socialistas como salvavidas. Y depende de la docilidad de Ciudadanos. Una curiosa relación simbiótica entre derechas: Ciudadanos garantiza al PP seguir en el gobierno, pero al precio de alimentarse del mismo electorado.

Con más de cinco mil millones de euros, 2016 ha sido el mejor año en inversión extranjera en Cataluña. Y la tendencia sigue en 2017. Desmintiendo así el discurso tremendista sobre los efectos del proceso soberanista para la economía catalana. ¿Qué significa eso? Que a pesar del ruido político, los inversores extranjeros no creen que el desencuentro actual alcance niveles preocupantes de conflictividad, ni contemplan “los escenarios institucionales alternativos” de los que les habla el gobierno catalán. Hoy por hoy, la independencia no está en la agenda del dinero. Desde fuera las cosas siempre se ven con mayor serenidad.

Dice el ensayista liberal Guy Sorman: “El macronismo es el avatar de una pasión francesa: despotismo ilustrado. De Bonaparte a De Gaulle, la búsqueda del redentor”.

Messi, Neymar, Ronaldo, Mourinho y tantos otros. Ya era hora que Hacienda entrara a fondo en el tinglado del fútbol: los futbolistas y estos entornos que se forran a su costa. Dinero fácil que va y viene con alegría. Que quien gana fortunas pague lo que le toca como los demás. Que los jugadores se defiendan si llevan razón y no se pongan en el patético papel de víctimas si las han cazado. Y que los clubs dejen de hacer el ridículo jaleando a los defraudadores. Mal asunto si las instituciones no están por encima de estos ídolos con pies de barro.