La avispa asiática, una de las muchas razones que ayudan a destruir el planeta
La desaparición de especies provocada por otras especies invasoras trae severas consecuencias para el futuro del ecosistema
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Avispón asiático. / GETTY IMAGES
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Madrid
A Juanjo Millás le preocupan los insectos. Sobre todo aquellos que alteran la biodiversidad. Un ejemplo son las abejas asiáticas, caracterizadas por su gran tamaño y agresividad con las especies comunes de nuestro país. Las invasiones de esta especie asiática traen algunas consecuencias que pueden alterar nuestro entorno y que se suma a los factores que poco a poco destruyen nuestro planeta. En Hoy por hoy con Gemma Nierga hemos ahondado en esta cuestión con Daniel García, profesor en el Departamento de Biología de Organismos y Sistemas de la Universidad de Oviedo.
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La hora de Millás (16/06/17) - Las consecuencias devastadoras de la avispa asiática
El planeta Tierra pierde su biodiversidad muy rápidamente. "Hay distintos martillos que van golpeando el mismo clavo que es la pérdida de especies", explicaba. El caso del avispón asiático supone un ejemplo más que destruye la vida de otras especies. Sin embargo, el ser humano destruye al día 50 especies, un hecho del que no se es consciente.
Lo que realmente altera el funcionamiento del ecosistema, explica, "no es la pérdida de especies en sí, sino su papel funcional". También se da el caso de especies cuya función se ha colapsado y todavía no se ha llegado a extinguir.
García apuntaba que aún estamos a tiempo de darle una solución a todos los cambios que provocamos en el planeta. Es probable, decía el profesor, que seamos la primera generación que sufre las consecuencias del cambio climático, pero "cada vez los efectos son más patentes porque los cambios son exponenciales", decía. Al menos, sí somos la primera generación consciente de los daños que se propician.
Los alumnos a los que enseña García miran el futuro del planeta con escepticismo, sabiendo que primarán otros intereses antes que poner medidas para solucionarlo. De momento, aunque haya concienciación del problema, esta se queda relegada por los efectos que estamos sufriendo ya como el calor. Una de las cosas en las que pensamos es en darle más potencia al aire acondicionado. "Si le doy más potencia al aire acondicionado, estoy gastando más energía, produciendo más CO2 y haciendo que mañana haga más calor que hoy", concluía.