Pan ecofeminista

Madrid

Inma y Mentxu de la Llave tenían muy claro lo que querían cuando apostaron por abrir su horno de pan en Getafe (Madrid): un producto hecho "con masa madre y harinas nacionales molidas a la piedra", explican, "lo que hace que sea un pan de verdad, que sienta bien, que no sea una bomba para el estómago"; pero a la fabricación, le añaden también el compromiso filosófico: "calificamos nuestro proyecto de ecofeminista porque no entendemos de otra cosa de hacer las cosas que no sea con la igualdad entre ambos sexos; creemos en la economía social y en el medioambiente" dice Inma; Mentxu añade: "el 70% de las personas pobres del mundo somos mujeres; por eso es tan importante el ecologismo para las mujeres, somos las que menos acceso tenemos a los recursos naturales".

Así es Panakós, el proyecto de estas hermanas que han buscado además participar en redes de quienes comparten su forma de mirar la alimentación y la sociedad: "agroecológico significa que algo tiene en cuenta cómo se produce, la ética del productor, el trato que se da a los trabajadores que participan en su elaboración... de ahí nace el sello SAES, que busca que productores y consumidores sepan qué consumen a partir de criterios más completos que los que dan las certificaciones oficiales", relatan. También participan en la Asociación Unida de Productores Agroecológicos (AUPA), que llevan sus productos a distintos mercados de Madrid.

En la segunda parte del programa, avanzamos el proyecto de la asociación de mujeres emprendedoras Emakume Ekin de abrir una escuela de programación para mujeres en Bilbao para finales de este 2017. Se trata de dar formación en las propias empresas participantes, para tratar de tender pasarelas al empleo, y se orientará a "mujeres que lleven un tiempo sin encontrar trabajo o quieran dar una vuelta a su trayectoria profesional; además, no será necesario que tengan una base de formación científica para poder aprender", explica Susana Zaballa, presidenta de Emakume Ekin.