"Un tributo a mis musas que luchan"
“Yo os invoco, hijas de Eva”, cantaba Gata Cattana en su Lisístrata. Hoy hemos invocado a nuestras hijas de Eva, a nuestras oyentes. Mujeres, como Lucía, de Mallorca, que recuerda “con unos veinte años, ir en bicicleta por Madrid, y al parar en un semáforo, que los tíos del coche de al lado me quitasen el sillín y me dijesen: ahora vas a ir más a gusto”

La Cabecera de las 9: 'Un tributo a mis musas que luchan'
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
Madrid
“En el primer reconocimiento ginecológico, como iba muy tensa, muy nerviosa, me dijo: señora, si no vale usted para esto, para qué va a valer”. “El profesor de Derecho Administrativo comentó que las mujeres en vez de estar sentadas en los pupitres deberíamos estar fregando las escaleras”. “Yo estaba trabajando de encargada en el metal y mi homólogo cobraba casi el doble que yo”. “Mi jefe decirme que fuera vestida de forma determinada para poder vender más”. “Vino un cliente y me dijo que si no había un señor para atenderle. ¿No hay un señor, un hombre, para atenderme? Como esas, cincuenta mil. A luchar”. “Déjame ser otra cosa que no sea un cuerpo, deja de follarme con los ojos, ya de paso, cuando paso por la calle sola”.
Rosa, de Madrid. Clara, de Palencia. Cristina, de Mollet, Barcelona. Lola, de Mallorca. Bibi, de Alicante. Gata Cattana. Ellas y muchas otras firman la cabecera de este Día Internacional de la Mujer.