Alto contenido moral
Si la sentencia del caso Nóos tenía miga, más miga aún tiene lo de la entrada o no en prisión de Urdangarin
Singapur
Da igual que las sentencias judiciales pretendan ser ejemplarizantes o no. Las sentencias terminan siéndolo siempre. La determinación de culpabilidad o inocencia ya establece un punto de referencia que nadie puede evitar.
Pero si la sentencia del caso Nóos tenía miga, más miga aún tiene lo de la entrada o no en prisión de Urdangarin, algo que podría plantearse en los próximos días. La determinación del número de años de condena, 6, 8, 10, es algo más técnico, algo que el gran público puede valorar con dificultad. Pero la cárcel es la imagen simbólica de la justicia en acción. Si el fiscal pidiera el ingreso, el Tribunal se enfrentaría a la decisión de más impacto popular. Tomaría esta decisión, sin duda, con criterios jurídicos, desentendiéndose de su repercusión social, pero es una decisión que la ciudadanía traduciría de inmediato sin necesidad de explicaciones técnicas, porque es una decisión visual y las imágenes se explican solas y transmiten siempre un mensaje, con una lección muy importante dentro.
El espectáculo de ver a Urdangarin entrar en prisión nos enseñaría una cosa. El espectáculo de verle en la calle paseándose en libertad nos enseñaría otra muy distinta. Pero ambas serían de mucho contenido moral, en un sentido o en el contrario. Ambas serían ejemplarizantes.