Martina Gómez: "Los hijos que han vivido en directo el asesinato de sus madres necesitan ayuda psicológica de por vida"
Ocho mujeres hacen huelga de hambre para reivindicar una ley integral para la violencia de género
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Madrid
Ocho mujeres están en huelga de hambre en la Puerta del Sol de Madrid. Acaban de pasar sus primeras 24 horas sin ingerir alimentos pero sus reivindicaciones son el alimento para seguir en pie. Piden una ley integral contra la violencia de género, que incluya medidas para plantarle cara a esta lacra social.
Martina Gómez: 'Los hijos de las mujeres asesinadas por sus parejas necesitan ayuda psicológica de por vida'
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Estas ocho mujeres tienen ocho historias detrás, algunas son víctimas directas pero también son hijas, hermanas y sobrinas. Vidas que también se pierden. Esta mañana se han juntado para rendir homenaje a Ana Gómez, una mujer gallega asesinada hace un año a manos de su marido, el mismo día en que acudió a la Casa de la mujer de Lugo a pedir ayuda.
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Ana vivía con su maltratador y con sus dos hijos menores de edad, ahora huérfanos. Desde el día en que su madre murió viven con su tía Martina, que es desde ese momento la tutora legar y ejerce de madre de sus sobrinos.
Para Martina la ayuda que reciben estos niños es casi inexistente "recibieron 15 sesiones de ayuda psicológica, que es el tope, pero no es suficiente". Alargando muchos las sesiones pueden durar un año, pero Martina matiza que "los hijos que han vivido en directo el asesinato de sus madres necesitan ayuda psicológica de por vida". Sus sobrinos tardaron tiempo en asumir la realidad de la situación, y por ello reivindica una mayor ayuda para estos niños, que sufren en silencio y que llevan una vida muy complicada. "Tiene problemas escolares, han tardado mucho en reaccionar", asegura.
Los sobrinos de Martina reciben tan sólo 215 euros de orfandad, "y nos tenemos que sentir afortunados porque hay otras familias que no reciben nada", matiza. Ella es quien se hace cargo de todo. "Conocemos un caso en el que los hijos reciben 72 euros trimestrales".
La reivindicación de Martina es la misma de tantas y tantas mujeres que sufren violencia machista: leyes que protejan a las víctimas y ayudas para ellas y sus familias. Primero en la prevención y después en el apoyo a las familias.
La reivindicación de Martina hoy es la de todas las mujeres, que sólo piden vivir sin miedo y en libertad.
